Con Julián Álvarez letal, River se quedó con el Superclásico

En un Monumental colmado, River ratificó su condición de candidato a pelear por el título en la Copa de la Liga Profesional del Fútbol Argentino al derrotar a Boca por 2 a 1, con una destacada actuación de Julián Álvarez, autor de los dos goles del Millonario. Con la derrota de hoy, Boca se aleja de la pelea del certamen y se pone fin al invicto de 8 partidos sin perder que tenía Battaglia. 

El cotejo inicio con cierto nerviosismo y pierna fuerte, por lo que en los primeros minutos las mayores incidencias en el juego pasaron por las decisiones del árbitro. A los 4 minutos, Rapallini amonestó a Enzo Pérez por una dura falta sobre Agustín Almendra en la mitad de la cancha.

Sin embargo, la peor parte se la iba a llevar Boca, que se quedó con diez hombres a los 15 minutos. Marcos Rojo vio dos tarjetas amarillas en escasos minutos y se fue expulsado, obligando a Sebastián Battaglia a cambiar los planes. Inmediatamente, Carlos Zambrano ingresó en lugar de Edwin Cardona para reacomodar la defensa Xeneize.

Pero sobre los 25′ una gol de otro partido cambió el rumbo del Supercásico. Julián Álvarez tomó la pelota por el centro del ataque, enganchó ante la marca, se hizo un espacio y sacó un tremendo remate que bajó justo para convertirse en el 1-0 del Millonario. En vano fue la volada de Agustín Rossi.

Boca aturdido por la situación, reacomodó fichas en intentó neutralizar los continuos arranques del Millonario. Recién sobre los 30’ el Xeneixe avisó con un derechazo de Advincula que se fue por arriba del travezaño.

Con el ingreso de Carrascal por Braian Romero, que se retiró con una molestia, River volvió a tener el manejo y dominio del encuentro. Por eso el 2 a 0 no tardó en llegar. Sobre los 42’ un error de Agustín Rossi en la salida, hizo que River recuperara rápido la pelota; Casco combinó rápido por derecha y envió un centro perfecto para que Álvarez la empujara y ampliara diferencias. El gol premió la diferencia entre un equipo y otro finalizando la etapa

En el arranque del segundo tiempo, Battaglia envió al campo de juego a Cristian Medina y Esteban Rolón Almendra y Diego González, con la intención de sumar piernas nuevas para contener al mediocampo de River. En tan solo unos minutos la idea del técnico Xeneixe quedó desactivada, porque River siguió con el dominio del encuentro y Boca sumergido en su impericia.

Sobre los 20’ nuevamente en una gran jugada de Julián Álvarez, la pelota le quedó a Santiago Simón, pero su remate se fue desviado, al corner. A esa altura del partido Boca solo estiraba su agonía, sin la pelota, corriendo detrás y sin ideas para modificar el rumbo del encuentro.

Algunos minutos más tarde Carrascal, tuvo el tercero cuando intentó picarla por encima de Agustín Rossi, quien llegó a desviar la pelota con lo justo. Con todo a disposición el equipo de Gallardo dispuso de algunas situaciones más, solo la falta de puntería, algún reflejo de Rossi y la complicidad de los palos hicieron que Boca no fuera goleado.

Pasado los 30’ el técnico de Boca hizo ingresar a Luis Vázquez y Aaron Molinas en lugar Pavón y Orsini, para darle aire a su castigado equipo. El mediocampista Xeneixe encontró rápidamente un lugar desde donde sostener la pelota y adelantar a su equipo. Solo por escasos minutos Boca pudo salir del asedio y tomar aire en el partido.

Los minutos finales fueron todo de River, ni el gol de cabeza finalizando el cotejo de Zambrano modificó la contundencia con la que el equipo de Gallardo se quedó con el Superclásico. Con un segundo tiempo que estuvo de más y con Julián Alvarez letal en los metros finales de la cancha, River fue un justo ganador del encuentro.