El encuentro de hoy entre Boca y Benfica en el debut de ambos en el Mundial de Clubes será especial para uno de los ídolos de la Selección Argentina, que tendrá un duelo plagado de reencuentros. En su último torneo con las Águilas antes de regresar a Rosario Central, el club de sus amores, Ángel Di María volverá a enfrentarse al Xeneize luego de 18 años. Además, será la vuelta del Fideo al césped del Hard Rock, donde disputo su último partido con la albiceleste, coronándose en la Copa América 2024.
La última vez que Di María había enfrentado a Boca fue el 18 de febrero de 2007, en un empate 1-1 entre su Rosario Central y el club de La Ribera en La Bombonera, partido que también marcaba el retorno al Xeneize del hoy presidente Juan Román Riquelme desde el Villarreal de España. Meses más tarde, Angelito cambiaría Rosario por Lisboa en una millonaria transferencia al Benfica, justamente el equipo en el que hoy milita. Tras el Mundial de Clubes, el rosarino de 37 años hará el camino inverso para volver al club de su vida.
Además de volver a enfrentarse a un club argentino, Di María retorna esta tarde al Hard Rock Stadium, lugar donde tuvo su despedida con la Selección. El campeón del mundo le dio un cierro glorioso a su trayectoria con la albiceleste en julio del año pasado ganando el título de la Copa América tras el 1-0 frente a Colombia. Tras su cuarto título con Argentina, Fideo consumó su previamente anunciado adiós a la albiceleste.
Qué dijo Russo de Di María
El entrenador de Boca, que conoce a Fideo por el vínculo que ambos tienen con Rosario Central, opinó del hecho de enfrentarse con él en el duelo ante Benfica: "Con Angelito tengo otro tipo de relación, le deseo lo mejor. Que tenga un buen regreso a Rosario Central, que lo disfrute. Lo mejor en lo que se viene, después de mañana, je", dijo Russo, en tono de broma.
El entrenador estuvo muy cerca de dirigirlo el año pasado en el Canalla, cuando todo parecía encaminado para lograr su regreso. Finalmente esto no se dio y Russo terminó abandonando el cuadro rosarino por cuestiones de salud. Hoy, un año después, Miguelo, uno de los máximos símbolos Central, lo enfrentará sentado en el banco de Boca justo antes de que Di María pegue la vuelta.