Es un día de celebración para todos los fans y, más aún, para la "Princesa del Pop" y el movimiento #FREEBRITNEY, que promovió sin descanso la libertad legal de la cantante.
En la tarde del viernes, finalizó la tutela que mantuvo a Britney Spears sin poder tomar decisiones legales sobre su persona, durante 13 años. Lo decidió este viernes la jueza Brenda Pennyde, en Los Ángeles, tras el alegato de la cantante en junio de este año.
La audiencia de esta tarde es la conclusión a meses de escandalosas revelaciones de dinámicas familiares abusivas y de la explotación de una artista en una historia que tiene como principal villano a Jamie y Lynne Spears, los padres de la cantante de 39 años. La custodia que restringió la vida personal y la carrera de Spears, ha sido disuelta.
La custodia de la persona y fortuna de Britney Jean Spears ya no es necesaria, ha concluido la jueza Penny.
Este fallo significa que la artista recupera el control sobre su salud, su trayectoria laboral y unos 60 millones de dólares que habían sido controlados hasta los centavos, por un fideicomiso, en manos de su padre y otros tutores.
Además sobre dicha custodia afirmó:
Refleja un ambiente tóxico que requiere la suspensión como tutor de Jamie Spears
"Tóxico", uno de los mayores éxitos de la cantante, fue usado por su abogado una y otra vez, durante sus argumentos ante la magistrada. “Su padre ha sido abusivo, cruel y tóxico”, sentenció Mathew Rosengart, el abogado de la cantante.
En junio, en una audiencia insólita solicitada por Spears, contó al mundo lo que era su vida bajo el yugo de la tutela.
No estoy contenta. No puedo dormir. Estoy enojada y deprimida. Lloro todos los días y todos los responsables de mi condición deberían estar en prisión.
Finalmente, la pesadilla terminó y la jueza Penny, ha concluido el drama familiar de los Spears, que duró 13 años. Britney tiene, ahora, su propio Día de la Independencia.