Marcelo Longobardi es conocido por su estilo sobrio y por mantener su vida personal lejos del foco mediático. Sin embargo, en una reciente entrevista con Ángel de Brito en Ángel Responde (Bondi), el periodista sorprendió al abrir su corazón y compartir uno de los aspectos más complejos de su historia: la paternidad de seis hijos fruto de tres relaciones diferentes.
Con una sinceridad poco habitual, Marcelo Longobardi relató que su primer matrimonio con Dolores Llorens dio lugar a sus tres hijos varones: Franco, Ignacio y Gastón. Luego, junto a Laura Palermo, fue padre de las mellizas Clara y Delfina. En el medio, durante un período de separación con Palermo, nació Josefina, hija de Marina Ruiz.
En la charla, el conductor reconoció que vivir separaciones y al mismo tiempo construir una familia ensamblada fue emocionalmente desafiante. “Era una cuestión muy complicada tener más hijos luego de mis tres varones”, confesó, dejando entrever el peso emocional que arrastraba por sus decisiones pasadas.
Marcelo Longobardi explicó que el sentimiento de culpa lo acompañó durante años. “Me separé cuando los chicos eran chicos… el mayor tenía apenas 14 años”, recordó, y mencionó que, en aquel entonces, los hijos de padres separados aún eran mal vistos, lo que intensificaba su malestar interior.
Ángel de Brito interpretó rápidamente ese trasfondo y señaló el mandato cultural del “para siempre” que pesaba sobre las familias. A lo que Marcelo Longobardi respondió que, incluso con el deseo de su nueva pareja de tener hijos, él sentía que estaría traicionando a los hijos del primer matrimonio.
El periodista también reconoció que esos años lo marcaron profundamente en su vínculo con los hijos. Aunque intentó estar presente, admitió que muchas veces se sintió emocionalmente bloqueado, dividido entre la culpa y el deseo de rehacer su vida. “Me costaba conectar plenamente. Sentía que no podía dar todo lo que quería”, expresó.
La presión interna fue tan grande que derivó en problemas físicos. “La pasé muy mal. Me lo guardaba todo, y eso me causó ataques de pánico”, reveló. Según contó, los episodios incluían hiperventilación y una extraña rigidez en el diafragma.
Para cerrar, dejó una reflexión contundente sobre la salud emocional: “¿Sabés cómo se resolvió? Solo, como ocurre habitualmente”. Con esta frase, Marcelo Longobardi no solo rompió el silencio, sino que también visibilizó una lucha silenciosa que atraviesan muchos padres tras una separación.