Un horrendo y macabro crimen se descubrió este domingo en la localidad bonaerense de Laferrere. Un hombre de 36 años mató de 11 puñaladas a su mujer embarazada y luego se suicidó, ahorcándose con un cable atado a un caño de gas en la vivienda. El pequeño hijo de la víctima, de solo 4 años de edad, fue testigo del crimen, y fue encontrado encerrado en una de las habitaciones.
La mujer, de 30 años y llamada Jimena Huanca cursaba un embarazo de 6 meses. Fue encontrada en el living de la casa. Su femicida se llamaba Juan Gabriel Mamani. Ambos eran de nacionalidad boliviana.
La Policía arribó a la vivienda y descubrió el crimen luego de una denuncia formulada por Yaqueline Mamani, de 40 años, hermana del asesino, quien aseguró que estaba muy preocupada porque no lograba contactarlo desde el viernes pasado. Ella sostuvo que el hombre era adicto a las drogas y el alcohol.
Luego de las pericias, los expertos de la Policía Científica establecieron que las víctimas habrían perdido la vida, al menos, 48 horas antes del hallazgo de los cadáveres. Se cree que el criminal primero trató de ahorcar a su pareja pero que, al fracasar en el intento, resolvió agredirla con un arma blanca.
El doctor Marcos Jesús Borghi intervino en la causa, que fue caratulada "Femicidio y suicidio" en la Unidad Temática de Homicidios de los tribunales de La Matanza.