Reclama volver a tener visitas
Motín y represión en la cárcel de Viedma
Después de varias horas de conflicto el personal del servicio penitenciario pudo controlar la revuelta con gases y balas de goma.
Unos veinte internos primero y otro grupo de un número similar después, protagonizó un motín en el Establecimiento de Ejecución Penal 1 de Viedma. Después de varias horas de reclamos por no contar con visitas, el personal del Servicio Penitenciario provincial ingresó a los pabellones con itakas con posta de goma y gases lacrimógenos, para poder controlar la situación.
El primer foco de protesta surgió en un pabellón de la planta alta. Los internos prendieron fuego colchones y frazadas para hacer oír sus reclamos que datan de hace varias semanas. Luego, tomaron la celaduría, aunque en el sector no había guardia por el motín.
Sin escuchar las advertencias del personal, los internos mantuvieron el conflicto y se enfrentaron cuerpo a cuerpo con los uniformados que ingresaron disparando balas de goma y gases lacrimógenos para controlar la situación. En ese momento otro grupo de presos se sumó a los reclamos de la misma manera y la solución volvió a ser la represión.
La fiscalía inició una causa por "tentativa de evasión y daños" y durante varias horas estuvieron trabajando en el interior de la cárcel para evitar nuevos motines.
En cuanto a la demanda de poder contar con visitas, el Ministerio de Seguridad confió que trabajan en un protocolo junto con el Ministerio de Salud. En caso de conseguir la habilitación sólo se implementaría en Viedma, sin contacto físico. Además las visitas tendrán que tener domicilio en esa ciudad. En tanto que las visitas íntimas continuarán suspendidas.
