La sometió, fue preso y desde la cárcel la amenazó de muerte

¿Los violentos se recuperan?, ¿las penas son muy blandas?, ¿puede reinsertarse en la sociedad?, estas preguntas que se escuchan a diario con cada hecho de violencia de género parecen tener una sola respuesta cuando se conoce la historia de Gloria, quien aún mantiene en su cuerpo las marcas del horror al que fue sometida . 

Su caso tomó trascendencia nuevamente porque la persona que la tuvo cautiva, encerrada sin poder comunicarse con su familia ni ver a nadie, la que le quemó la espalda con agua caliente, la quiso prender fuego con nafta y hasta le tatuó "Anibal" con un cuchillo en uno de los glúteos "para que siempre lleves mis marca", fue juzgado porque desde la cárcel donde cumple condena, por "lesiones leves", le envió un mensaje a su víctima para avisarle que le quedaba poco encerrado y que cuando volviera la iba a matar.

La fiscalía logró llevarlo a juicio a Anibal Figueroa y fue declarado culpable de amenazar telefónicamente a su ex pareja quien durante varios años fue víctima de violencia de género. En el debate quedó comprobado que desde la cárcel de régimen abierto de Pomona se comunicó con su ex por teléfono y le advirtió que tenía pensado regresar a Cipolletti y que la iba a matar. 

Gloria, al recibir el llamado, estaba acompañada de una persona que aceptó ser testigo de esta nueva denuncia en contra de Figueroa y finalmente terminó siendo vital para que la Justicia pueda volver a condenarlo por amenazas en contexto de violencia de género. El juez dio a conocer el veredicto de culpabilidad y ahora habrá que esperar que se conozca la pena que va desde los seis meses hasta los dos años y es excarcelables, sin embargo en este caso -como el imputado tiene antecedentes-  la sentencia será de cumplimiento efectivo.

El hecho ocurrió el 16 de noviembre de 2019, la víctima estaba junto con su prima en la Isla Jordán y sin saber de quien se trataba, atendió su teléfono celular. No hizo falta que le dijera quien hablaba, es que ella conocía a la perfección la voz de su ex, quien la torturaba a diario, tampoco que le repitiera el mensaje, porque fue muy  claro "en un mes salgo y te voy a matar", le dijo Figueroa.

La fiscalía consideró que Figueroa “no entiende que se acabó su historia con la mujer y por eso continúa con su conducta de hostigamiento y amenazas. Esa historia se terminó de manera violenta y él fue condenado”, se sostuvo en la apertura del debate.

Luego de la denuncia por amenazas, Figueroa fue trasladado a Viedma donde perdió los beneficios del régimen abierto que tenía en Pomona. Actualmente se encuentra en la cárcel de Cipolletti donde espera la nueva sentencia.