Lo acusan de usurpación y lo dejan vivir en el departamento

Una francesa, que desde 1992 es dueña de un departamento en uno de los edificios más selectos de Bariloche, denunció que su propiedad con una vista única al lago Nahuel Huapi, la que no habita desde hace 10 años, fue usurpada. El hombre fue acusado de cambiar la cerradura y hasta vender algunos costosísimos muebles de estilo inglés, sin embargo al tener un contrato de alquiler y recibo por haber pagado seis meses anticipados del alquiler, la Justicia resolvió no innovar y le permite quedarse allí hasta que defina la situación.

El imputado, Diego Yunes, es un conocido comerciante de la ciudad, que alquila departamentos y luego subalquila a turistas. Pero en este caso, lo acusan de haber sido quien cambió la cerradura del departamento de dos dormitorios, living y comedor que tiene una vista única y privilegiada al lago Nahuel Huapi, ubicado en pleno centro de la ciudad. En su descargo, asegura que firmó un contrato con una persona que lo alquilaba, el cual tiene firmas certificadas en la Comisaría 2°, y por el cual se fijó un alquiler de 18 mil pesos por mes, del que pagó seis meses por adelantado.

Además, Yunes, vendió algunos de los costosos muebles de estilo inglés que estaban en el interior del departamento. "El dueño me dijo que no podía retirarlos porque debía viajar urgente, por lo que los compré a 150 mil pesos con la intención de revenderlos", explicó en su descargo, por el cual también presentó un boleto de compra y venta.

La dueña del departamento A del quinto piso del edificio Andino Norte de Elfein y Pasaje Juramento, Elizabeth Skowronska, una mujer francesa, explicó que en 1992 compró la propiedad y que hace unos 10 años se fue a vivir a Chile. Que dejó a una persona encargada del pago de los impuestos y que decidió dejar su casa lista para habitarla en cualquier otro momento, por lo que sólo cerró con llave y dio de baja algunos servicios esenciales como electricidad y gas.

La fiscal Alejandra Bartolomé y el fiscal adjunto Facundo D´apice, realizaron la formulación de cargos por el delito de usurpación contra Yunes. Le atribuyeron haber cambiado la cerradura, señalando que ya había desaparecido de la propiedad una mesa con ocho sillas de gran valor, por lo que reclamó, la restitución inmediata del departamento y ante la negativa del juez, una medida de no innovar que sí fue aceptada.

Bartolomé destacó que fueron los vecinos quienes advirtieron a la administradora del edificio que ese departamento estaba siendo ocupado y que a partir de esa instancia tomó conocimiento la víctima. 

El juez de Garantías Juan Pablo Laurence, aceptó la apertura de la investigación por cuatro meses, aunque desestimó el planteo de restitución del departamento a su titular, apoyándose en la verosimilitud del derecho. De todos modos, ofició a Camuzzi al que le prohibió realizar la conexión del gas y estableció una medida de no innovar por la que Yunes no podrá disponer de los bienes muebles y le fijó la obligación de habitarlo en soledad.

Laurence entendió que las circunstancias de tiempo, modo y lugar en el hecho que relató la fiscalía, eran suficientes para acreditar que despojó de la posesión a la dueña. “La titularidad del bien no está controvertida, tampoco quién lo cuidaba. Esa posesión es del año 92”, aseguró, quien además confirmó que se produjo un despojo “cambio de cerradura mediante”.