Le mandó fotos desnudo a una alumna y es culpable

El docente de matemáticas del CEM 57 de Maquinchao fue considerado culpable del delito de grooming, por enviarle fotos suyas desnudo a una de sus alumnas, una niña de 13 años. En el juicio se comprobó que el hombre de 37 años, se hizo pasar por un adolescente de 17 años y generó una confianza con la menor vía chat de la red social Snapchat. Sólo resta saber la pena, que para este delito tiene un mínimo establecido de 6 meses y un máximo de 4 años.

La intención del docente era cometer un delito contra su integridad sexual de la niña, que finalmente no se concretó. La jueza de juicio Verónica Rodríguez explicó en su veredicto que el grooming no necesita que se materialice un abuso físico para configurar un delito.

Ninguna duda me cabe de que contactó a la niña a través de la red social Snapchat con el propósito de cometer un delito contra su integridad sexual. Para ello seleccionó una red social de mensajería instantánea utilizada exclusivamente por menores de edad, que le garantizó ocultar su verdadera identidad, ser percibido como un par por su joven víctima y una vez ganada su confianza acceder a sus fotografías, a las que comentaba con emoticones de corazones y de enamorado, para ir así ganando su confianza hasta lograr contactarla por el chat privado de la misma aplicación

Lo que la ley pretende con esta figura penal es “proteger la libertad sexual” de los y las menores de edad, por lo que el delito se consuma con la efectiva comunicación del adulto con el niño o niña a través de medios digitales y con la finalidad última de atacar su integridad sexual.

“Ninguna duda me cabe de que contactó a la niña a través de la red social Snapchat con el propósito de cometer un delito contra su integridad sexual. Para ello seleccionó una red social de mensajería instantánea utilizada exclusivamente por menores de edad, que le garantizó ocultar su verdadera identidad, ser percibido como un par por su joven víctima y una vez ganada su confianza acceder a sus fotografías, a las que comentaba con emoticones de corazones y de enamorado, para ir así ganando su confianza hasta lograr contactarla por el chat privado de la misma aplicación”, detalló la jueza.

El hombre hacía comentarios a la niña sobre su aspecto físico, su ropa y partes de su cuerpo, luego intercambió fotografías y finalmente generó incomodidad en ella al enviarle tomas de él desnudo. El diálogo se mantuvo durante seis meses a través de la red social, hasta que circunstancialmente salió a la luz la verdadera identidad del autor de esas expresiones.

El caso llegó a juicio por tres hechos similares relacionados con niñas de la localidad. En un caso el docente fue declarado culpable, en tanto que en los otros dos el hecho se declaró atípico por no reunir los requisitos legales que configuran el delito de grooming.