Volvía de las Grutas y un trozo de asfalto mató a su marido

Más de una década debió esperar la viuda de un automovilista que murió al recibir el impacto de un trozo de asfalto que se desprendió de la ruta Provincial 2, cuando regresaba de Las Grutas, en enero de 2011. El tardío fallo condena a la empresa estatal Vialidad Rionegrina a pagarle más de 3,5 millones de pesos más los intereses actualizados hasta la fecha de la sentencia.

El hecho se produjo el 5 de enero de 2011, cuando Gustavo Martínez junto con su esposa y una tía de ella, Rosalba Carbonel volvían desde Las Grutas hacia Roca por la ruta Provincial 2. Pero en la zona de La Salina del Gualicho ( a unos 50 kilómetros de Las Grutas), y al circular detrás de un camión, un trozo de pavimento que se desprendió de la ruta, rompió el parabrisas e impactó en su cabeza.

El hombre, se desvaneció y cayó sobre el cuerpo de su esposa, que viajaba en el asiento del acompañante. Para Patricia Cruzado fue imposible controlar el auto, menos aún después de ver a su marido inconsciente y lleno de sangre. Como consecuencia, el vehículo cruzó de mano y al llegar a la banquina contraria comenzó a dar tumbos.

El conductor murió. Presentaba una herida en la zona occipital de su cabeza producida por el golpe del trozo de pavimento. En tanto que la mujer sufrió un fuerte golpe en la cabeza y la fractura de una clavícula.

La mujer planteó una demanda civil contra Vialidad Rionegrina, responsable del mantenimiento de la ruta provincial. Además de reclamar por la muerte de su marido, tuvo que iniciar un extenso tratamiento psicológico para recuperarse de la situación traumática que le tocó vivir. 

La empresa provincial intentó excusarse y presentó una pericia médica de parte que indicaba que no era posible saber si el hombre murió por el impacto del trozo de asfalto o por los vuelcos posteriores. Además, alegó imprudencia del conductor del Corsa.

La sentencia del juez Civil de Viedma cita fallos del STJ contra la empresa vial en los que "quien contrae la obligación de prestar un servicio lo debe realizar en condiciones adecuadas para llenar el fin para el que ha sido establecido, siendo responsable de los perjuicios que causare su incumplimiento o su irregular ejecución", y deja en claro que “el Estado responderá siempre que haya una falta de servicio por no cumplir los deberes impuestos a los órganos del Estado por la Constitución Nacional, una ley o reglamento”.

Para Vialidad Rionegrina la ruta presentaba en ese entonces “un estado aceptable de transitabilidad en la calzada, existiendo sectores puntuales con un estado regular, los cuales son permanentemente conservados con recursos y personal de la Delegación III de la Dirección de Vialidad Rionegrina”.

En el informe del lugar se consignó que en “sentido de circulación Sur-Norte y viceversa, es una recta con ondulaciones con agua en razón del factor climático reinante en la zona (lluvia), con las líneas blancas discontinuas en el centro de la ruta, sin carteles indicadores alguno" En el rastrillaje, casi en el centro de la ruta más precisamente del carril contrario al que circulaba el Chevrolet Corsa, "a unos doscientos metros antes de llegar a la primera huella que sale a la banquina, se observa un bache en la misma, de unos cuarenta centímetros de diámetro”. Los peritos analizaron el trozo de pavimento desprendido  que quedó dentro del auto y tenía un tamaño de 15 por 15 centímetros, con 7 centímetros de espesor. 

La sentencia agregó que “en el ámbito de la Justicia nacional se ha sostenido que a existencia de los baches, ondulaciones o irregularidades en el pavimento, que son causa de un accidente, responsabilizan al Gobierno de la Ciudad por cuanto es su función la conservación en buen estado y reparación de las calzadas”. En este caso al ser una ruta Provincial, Río Negro deberá hacerse cargo de la indemnización por el fallecimiento y por el daño moral de tres millones y medio de pesos. Además deberá cubrir el daño psicológico.

Esta ruta provincial, principal vía para acceder desde el Alto Valle y Valle Medio a Las Grutas y por la que los camiones cargados de peras y manzanas llegan al puerto de San Antonio, fue recientemente pavimentada y para su mantenimiento la gobernadora Arabela Carreras logró el apoyo de los legisladores oficialistas y se aprobó la ley por la que se empezará a cobrar peaje.