Volvían de una fiesta y terminaron dentro del canal

Faltaban pocos minutos para las 8 de la mañana y el teléfono de la comisaría sonó una vez más, como a lo largo de toda la noche. Cuando los policías pensaron que ya había pasado lo más intenso del fin de semana, debieron salir rápidamente ante la gravedad del hecho: tres personas permanecían dentro del canal Principal de Riego luego de que la camioneta en la que regresaban a sus casas terminó en el cauce que a esta altura del año está en su cota máxima.

Junto con los uniformados de la Comisaría 22° de Cervantes, también llegó una ambulancia del hospital y una dotación de Bomberos Voluntarios. Al llegar al lugar señalado, frente a la chacra 293 en la zona de Puente Cero, en el límite este de la localidad, los Bomberos tuvieron que intervenir rápidamente, porque los tres hombres que permanecían en el agua, ya estaban agotados y sin fuerzas, por lo que debieron alcanzarlos con sogas y ganchos.

Una vez afuera, los jóvenes con jeans y camisas, fueron atendidos por el personal del hospital, quienes corroboraron que no tenían heridas de gravedad, sólo algunos raspones y excoriaciones como consecuencia de la caída en la camioneta al agua y los intentos reiterados por tratar de salir del canal.

Se supo que los tres ocupantes de la camioneta Ford Ranger negra volvían de una fiesta por la denominada ruta Chica, que a esa altura del Alto Valle es un camino de tierra sin ningún tipo de mantenimiento paralelo al canal Principal. Cuando llegaron a la zona de Puente Cero, donde existen unos saltos y compuertas, el conductor perdió el control repentinamente, sin que pudiera reaccionar para evitar la caída.

El hecho podría haber sido más grave, sin embargo los ocupantes tuvieron la fortuna de que la camioneta no se trabó en ninguna parte del recorrido hacia el medio del canal, donde quedó sobre las cuatro ruedas sin volcar. Eso facilitó que los jóvenes pudieran en un primer momento bajar las ventanillas y luego abrir las puertas para salir.

Las víctimas pertenecen a la comunidad boliviana y luego de pasar la noche en un festejo, regresaban a sus casas en la zona rural entre Roca y Cervantes.