Manejaba borracho y drogado: mató a su amigo

En pocos días se cumple un año en un accidente fatal conmovió a todos los vecinos de San Martín de Los Andes. Un joven conducía alcoholizado y drogado, y chocó contra el Centro Cultural Cotesma. Su amigo de 19 años que viajaba en el asiento del acompañante falleció. El conductor responsable admitió su culpabilidad y recibió una pena en suspenso.

Este jueves, se llevo a cabo una audiencia, el asistente letrado de la fiscalía Ignacio Oyuela presentó un acuerdo en el cual arribaron las partes de responsabilidad y de esta manera evitar con el avance del juicio. El mismo implicó no sólo la aceptación de responsabilidad del imputado sino también contó con el consentimiento de la familia de la víctima.

NOCHE TRÁGICA

• El hecho ocurrió el pasado 20 de diciembre de 2021, pasadas la 1 de la madrugada, momento en que Quilapán a bordo de su auto Chevrolet Corsa "bajo el efecto de estupefacientes", iba con Pedro Lorenzo Dietrich, en el asiento del acompañante. "El imputado conducía un vehículo por la calle General Roca de San Martín de los Andes, a una velocidad que superaba la máxima permitida de 40 kilómetros por hora. Al realizar una maniobra imprudente, temeraria y antirreglamentaria de sobrepaso e invadir la senda contraria, perdió el control del vehículo, derrapó y embistió el cordón de la vereda, impactando de manera frontal contra el frente de ingreso del Centro Cultural Cotesma (Roca 1154), lo que le provocó la muerte a su acompañante por los diversos politraumatismos sufridos. El imputado conducía bajo los efectos de estupefacientes", precisaron fuentes del Ministerio Público Fiscal.
• Se estableció a partir de pericias accidentológicas y los estudios toxicológicos a los que se sometió al acusado.
• La víctima fatal falleció en el acto, mientras que el conductor había sido trasladado e internado en terapia intensiva.

Asimismo, cabe destacar que, el delito acordado por las partes fue el de homicidio culposo en accidente de tránsito agravado por estar bajo efectos de estupefacientes, conducción en exceso de la velocidad permitida y con culpa temeraria, figura para la cual se fijó la pena en una de tres años de prisión en suspenso y la inhabilitación para Quilapán para conducir vehículos por cinco años.