Tenía siete puñaladas y lo abandonaron al lado de una ambulancia

A toda velocidad, un auto llegó a la sede del Sistema Integral de Atención Rionegrina de Medicina de Emergencia (SIARME), sin mediar ningún intercambio con el personal que había en el interior, dos hombres se apuraron a bajar a otro que estaba empapado en sangre, lo acomodaron al lado de una de las ambulancias y se fueron raudamente sin dejar ni un sólo dato.

El hecho, sumamente confuso, se produjo ayer, poco después de las 19 en la casa del barrio Universitario de Roca donde funciona el servicio de emergencia provincial, pero en donde no se realizan atenciones médicas. El personal de turno se ocupó de lo importante y comenzó con las atenciones del hombre que presentaba un estado grave como consecuencia de las puñaladas que tenía en su cuerpo.

Inmediatamente, mientras trataban de contener la sangre que brotaba de las heridas, el médico ordenó el traslado al hospital Francisco López Lima, donde la víctima ingreso con escasos signos vitales. En el centro de salud lo llevaron al quirófano, donde lo operaron, pero su estado es crítico a raíz de la cantidad de sangre perdida y la gravedad de las heridas sufridas, que afectaron órganos vitales.

El hombre, de unos 34 años, que estaba indocumentado por lo que aún no se sabe su identidad, permanece internado en la Unidad de Terapia Intensiva del hospital en estado de coma farmacológico y con asistencia respiratoria mecánica. En total tenía siete heridas de arma blanca en diferentes lugares del cuerpo, pero las más complejas fueron las que sufrió en el tórax y el abdomen.

La Policía de la Unidad 31° abrió una investigación para tratar de determinar la identidad de la persona internada, como también dilucidar en que circunstancias le provocaron las graves heridas que presentaba en el cuerpo. Asimismo, se espera la evolución de su cuadro complejo de salud para que pueda aportar algún dato que sirva en la causa.