Villa Ceferino: el joven del tiroteo ¿se suicidó?

El joven que esta mañana baleó a su cuñado y se tiroteó con policías, fue encontrado muerto en el comedor de la vivienda. Durante el enfrentamiento, uno de los uniformados recibió un disparo que le quedó alojado en la base del cráneo. El familiar herido sigue internado grave.

Los investigadores del sangriento episodio ocurrido cerca de las cinco y media de la mañana en Juana Azurduy y Varvarco del barrio Villa Ceferino, lograron reconstruir primariamente la mecánica de los hechos.

Según la información brindada por una fuente a mejorinformado.com, el autor de los disparos fue quien apareció muerto con un tiro en la sien derecha, boca abajo, y con un revólver calibre 32 aferrado a su mano derecha.

La secuencia que los investigadores lograron determinar, en base a testimonios y a la verificación de cámaras de seguridad, fue que hasta esa vivienda, del sector Huertas, llegó un joven portando dos armas cortas. Una cámara con sistema infrarrojo lo captó cuando caminaba hacia la casa de su hermana con un arma en cada mano.

Una vez en la vivienda, “se encontró con su hermana y la pareja durmiendo y los hijos de ambos en otra habitación. Allí le disparó a su cuñado”, señaló la fuente. El balazo le ingresó al hombre  por un ojo.

Los móviles policiales no tardaron en llegar. “Cuando arribaron los móviles, se encontraron con una mujer saliendo de la casa con sus hijos y gritando que habían matado a su esposo”, señaló el investigador.

En cuestión de minutos, el lugar fue un infierno de balas. “El agresor mantuvo un enfrentamiento de más o menos 20 minutos con los policías. En ese tiroteo, uno de los uniformados recibió un disparo que le ingresó por la oreja izquierda y el plomo quedó alojado en la base del cráneo, entre el cuero cabelludo y el hueso”, afirmó el informante. El uniformado está fuera de peligro, fue dado de alta y se evalúa la conveniencia de intervenirlo quirúrgicamente para extraerle el proyectil.

Una vez finalizado el tiroteo, los policías de la comisaría tercera se introdujeron en la vivienda y se encontraron con un joven tendido boca abajo en el comedor, con una herida de bala en la sien derecha y un revólver calibre 32 aferrado en su mano diestra. “Según Criminalística, presentaba un tatuaje alrededor del orificio de entrada del proyectil, por lo que todo indica que fue efectuado con el cañón apoyado en la piel”, señaló la fuente, para concluir que se habría tratado de un suicidio.

Al herido, pudieron encontrarlo en el primer piso de una obra en construcción vecina, cerca de las diez de la mañana, es decir casi 5 horas después de haber recibido el disparo. “Los policías escucharon quejidos que provenían de la obra de al lado; cuando fueron hasta allí, se encontraron con el marido de la mujer. Tenía un disparo en el ojo”, afirmó.

El hombre fue llevado al hospital Castro Rendón y quedó internado en terapia intensiva. Su estado es grave.