Una niña de 12 años falleció en Texas tras pasar cuatro días en estado crítico en su hogar, donde sus padres intentaron curarla con batidos y vitaminas en lugar de buscar atención médica. El trágico suceso ocurrió cuando la menor, identificada como Miranda Sipps, no recibió la asistencia necesaria para tratar las graves lesiones que presentaba, lo que finalmente llevó a su muerte.
Miranda, que era estudiante y animadora, murió el lunes por la noche en un hospital después de que su madre, Denise Balbaneda, finalmente decidiera llevarla cuando la niña comenzó a tener dificultades respiratorias. Para ese momento, ya era demasiado tarde. Las autoridades locales informaron que la menor estuvo "mental y físicamente incapacitada y sin responder" durante los cuatro días que pasó en su casa.
Denise Balbaneda y el padrastro de Miranda, Gerald González, de 40 años, fueron arrestados y enfrentan cargos por no buscar ayuda médica a tiempo, lo que agravó el estado de salud de la niña. Según el comisario David Soward, la pareja decidió tratar las lesiones de la menor por sus propios medios para evitar que se investigara el origen de sus heridas, de las cuales no se revelaron detalles específicos.
Durante una conferencia de prensa, Soward mencionó que los padres creyeron que podrían curar a la niña en casa, dándole batidos, vitaminas e incluso, según sospechan las autoridades, oxígeno en algún momento. Sin embargo, la menor apenas podía parpadear y mover las manos durante esos días críticos.
El lunes, cuando finalmente fue llevada al hospital, los médicos intentaron salvarla, pero sus esfuerzos fueron en vano. Según las pericias, Miranda había sufrido lesiones graves el jueves por la noche, pero la falta de atención médica adecuada en los días siguientes resultó fatal.