Una escena que revive el temor por los ataques en patota
El video de un partido de fútbol en Mariano Acosta volvió a encender las alarmas por la violencia extrema entre adolescentes. En las imágenes se observa cómo un joven de 16 años queda inconsciente tras recibir una patada directa en el mentón, un ataque que remite de inmediato al caso Báez Sosa y que generó un profundo rechazo social. La violencia en el deporte no da tregua.
El hecho ocurrió en un complejo deportivo conocido como La Cancha del Pola, ubicado en Tonelero, entre Homero y Ruta 40, en Merlo. La víctima vive a pocas cuadras del lugar.
La secuencia de violencia que terminó con un adolsecente en el piso
La filmación muestra que el joven estaba peleando con otro adolescente de 17 años en la mitad de la cancha. Durante el forcejeo, fue empujado hacia la parte trasera del predio y cayó al suelo.
En ese momento intervino un tercer sujeto, que apareció desde el lateral de la cancha y le propinó una patada en la cabeza que lo dejó inmóvil y desvanecido. Tras el golpe, el agresor realizó un gesto con la mano hacia la cintura, en aparente señal de poseer un arma, mientras gritaba contra quienes estaban presenciando la escena. Segundos después, otra persona le propinó una piña en la cara, cuando el joven ya estaba desmayado.
Traslado al hospital y asistencia inmediata
El adolescente quedó tendido contra un alambrado y fue asistido por conocidos que se acercaron de inmediato. Posteriormente, fue trasladado al hospital Héroes de Malvinas, donde —según fuentes policiales— recibió atención y fue dado de alta.
Actuación policial de oficio ante la falta de denuncia
Pese a la gravedad del ataque, no se presentó denuncia formal. Sin embargo, la Policía y la Justicia iniciaron actuaciones de oficio tras la viralización del video. El objetivo inmediato es identificar al autor de la patada, cuyo golpe pudo haber sido mortal.
La circulación de las imágenes generó un amplio repudio y reavivó el debate sobre la escalada de violencia entre jóvenes. Un episodio que, a casi seis años del crimen de Fernando Báez Sosa, vuelve a mostrar que la sociedad aún enfrenta hechos de brutalidad que ponen en riesgo la vida de cualquier adolescente.
evidencia el nivel de degradación que atraviesa la sociedad argentina, con dosis de violencia y de alteración que pone en peligro a cualquiera.
