¿La pareja que se conoció por Tinder llevó al extremo una agresiva práctica sexual? Es que ahora la mujer que acusó a su "match" de golpearla, vejarla y tenerla retenida prestó declaración ante la fiscal, y sus dichos lo cambiaron todo.
En su testimonio dejó afuera la acusación de privación ilegítima de la libertad, mientras que la inclusión del delito de abuso sexual tampoco figura, aunque su posible incorporación dependerá del resultado de una pericia.
Eso dio lugar a una interpretación distinta de lo ocurrido. Ya que aunque pidió que no se revelaran detalles de lo que contó, trascendieron algunos datos que formaron parte de ese relato. En ellos el alto consumo de drogas y alcohol se mezcla con encuentros sexuales que asocian el dolor con la obtención de placer.
Debido a esto, se abrió una hipótesis: la que alude a que ambos se habrían reunido para compartir una sesión de BDSM (siglas que indican Bondage -ataduras-, Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo). Una combinación que incluye castigos, juegos de roles, humillaciones y la búsqueda de superar las barreras del dolor, para descubrir un goce en ese padecimiento.
Cabe destacar que estas prácticas son consensuadas, e incluyen el acuerdo de límites y palabras claves para evitar que ese sufrimiento que se liga al gozo se intensifique, llegando a límites que dejen de ser agradables para alguno de los participantes.
Pero, obnubilados por estimulantes y enfervorizados por el encuentro, es posible que muchos ignoren esos pedidos de frenar algunos de esos "juegos". De hecho, hubo muchos casos en los que esto terminó en lesiones, o incluso en muertes.
Ahora, no se descarta que algo similar haya ocurrido con esta pareja. Aunque todo sigue siendo materia de investigación.
¿Qué es el BDSM?
Bajo esa sigla se engloban muchas prácticas sexuales, que pueden darse solas o combinarse entre sí, según lo decida la pareja o quiénes compartan el encuentro íntimo.
Las letras aluden a Bondage, Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo. El término bondage es francés y significa esclavitud. Por eso el juego incluye atar a otro con cuerdas, arneses o esposas.
La disciplina, dominación y sumisión son distintas caras de la misma práctica, e implica la alternancia de castigos y sometimientos.
En el sadismo (palabra que proviene del novelista Donatien Alphonse François de Sade, más conocido como el Marqués de Sade) el sufrimiento físico/o psíquico al que se somete otra persona es fuente de placer. Visto al revés, se vuelve masoquismo, cuándo lo que excita es ser objeto de vejámenes.