Compró un juego por internet y jamás le llegó

Una vecina de Cipolletti que pasó por la amarga experiencia de comprar un producto que jamás le entregaron, consiguió que la empresa fuera condenada a pagarle 35.497 pesos.

Sin embargo, es altamente probable que su lucha continúe, ya que el fallo puede ser apelado.

La mujer compró, por Internet, un juego infantil que se llama giroscopio, y que debían entregarle en su casa, con los gastos de transporte incluidos.

Confiada en esa promesa, hizo una transferencia, pero pasaron los 20 días pactados y el juego no llegó.

Indignada, le reclamó a la empresa Inflables Mega Toys a través de llamados telefónicos y de correos electrónicos, pero no obtuvo soluciones.

Entonces inició una demanda ante el juzgado de la jueza Civil Soledad Peruzzi.

En su denuncia la mujer consignó que la empresa ensayó distintas excusas. Primero dijo que no tenía disponibilidad del juego; luego que tenían un juego más grande y que debía abonar la diferencia; y finalmente que como había pasado un tiempo bastante prolongado desde la contratación, debía abonar una diferencia de precio o los gastos de traslado.

Inflables Mega Toys no se presentó a contestar la demanda civil ni concurrió a la audiencia. En consecuencia fue declarada en rebeldía.

La jueza admitió como prueba la orden de compra emitida por Mega Toys Fábrica de Juegos infantiles, un informe del Banco Santander Río que da cuenta de la transferencia, monto, y número de tarjeta desde la cual se realizó la transferencia.

“Estimo que corresponde condenar a su devolución, la suma reclamada de 13.500 pesos con más los intereses desde la fecha de la transferencia y hasta su efectivo pago; que arroja al día de hoy la suma de 35.497 pesos”, consignó la jueza en la sentencia.