CIPOLLETTI
Tal fue la desfachatez que ni siquiera devolvió la seña
Un cliente compró un portón. Y no sólo no se lo entregaron, sino que ni siquiera le devolvieron la seña. La Justicia condenó al fabricante.
Los incumplimientos de comerciantes y fabricantes son cada vez más frecuentes en la región. Tal es así que, ahora, la Justicia cayó sobre un fabricante de portones que, tal fue su desfachatez, que ni siquiera se dignó a devolver la seña. Mucho menos a entregar el producto.
La causa se tramitó en el juzgado de la jueza de Paz de Cipolletti, Gabriela Lapuente, quien condenó al fabricante a abonarle a su cliente la suma de 31.490,07 pesos por daños y perjuicios y daño punitivo.
Fuentes judiciales indicaron que ese monto incluye 13.800 pesos que los clientes habían abonado en concepto de adelanto, 11.200 pesos en concepto de daños y perjuicios porque los clientes tuvieron que comprar otro portón, y 5.000 pesos en concepto de daño punitivo. El monto restante corresponde a los intereses.
La jueza fijó tres audiencias de conciliación antes de resolver, pero el demandado nunca se presentó. Entonces le aplicó la condena contemplada en la ley de Defensa del Consumidor.
Fuentes judiciales indicaron que el cliente acompañó impresiones de las conversaciones mantenidas por medios electrónicos, en las que se puede observar cómo se desarrollaron los hechos.
“En resumen el diálogo está compuesto por fotografías del modelo del producto pretendido, reiteradas excusas en cuanto al plazo de cumplimiento y colocación del portón encargado, así como con pretextos para concretar la devolución del dinero”, dijeron las mismas fuentes.
A ello se le sumó dos recibos que presentaron los clientes firmados de puño y letra por el fabricante de portones al momento de aceptar el dinero en concepto de adelanto.
Los clientes habían contratado la fabricación de un portón de chapa levadizo de 3,70 metros de frente y 2,50 metros de largo. El trabajo debía estar listo para el 11 de noviembre de 2017.
