"Pasamos de pensar obras, a que la gente no muera de hambre"

Diego Mauro es dirigente del FOL, el "Frente de Organizaciones en Lucha", una organización social que nació en la crisis del 2001 en Buenos Aires, y que desde hace 5 años está en Neuquén. El referente contó al aire de La Primera Mañana por AM550 y 24/7 Canal de Noticias, como tuvieron que cambiar las prioridades en su planificación, producto de la crisis por la pandemia:

"Nosotros en enero y febrero planificamos todo el año. El eje del trabajo es muy importante y decidimos priorizar las obras en los barrios, y luego pasó lo que pasó. Pasamos de pensar en obras, a ver como hacíamos para que nuestros compañeros y compañeras no se mueran de hambre" expresó.

"Entre todas las organizaciones sociales, por la pandemia, hacíamos 10 mil raciones de comida por semana, cuando eso antes no pasaba. Teníamos 2 comedores y ahora son siete. En esa situación estamos hoy".

En cuanto a la organización del trabajo en los lugares más humildes, y el esfuerzo en pandemia, Mauro contó: "Muchos compañeros son esenciales y mantuvieron los comedores. Le pedimos al gobierno que testeen a los compañeros y eso no pasó. Los elementos de higiene los compramos nosotros, y era impresionante ver como los vecinos a las 7 de la tarde venían a tocar las puertas para ver si había algo más para comer. Es dramático, pero parece que ahora se naturalizó".

"De las 10.000 raciones de comidas semanales que entregábamos en pandemia, el Gobierno aportaba sólo 1.200. No llega ni al 20% el aporte".

La situación se agravó, y según contó el referente de la organización, el problema de la alimentación y el trabajo preocupa, pero hay otras cuestiones que también se acentuaron, como la violencia: "La gente se quedó sin laburo y se tuvo que quedar en su casa. Los pibes comían en la escuela y ya no lo hacen. Eso llevó además a que se triplicaran los casos de violencia. Eso nos preocupa mucho".

Pensando a futuro, y teniendo en cuenta las consecuencias que esta crisis va a dejar en los sectores más humildes de la sociedad, Diego Mauro contó: "En nuestra organización se sumaron muchos jóvenes, y hacemos un diagnóstico: se quedaron sin laburo o dejaron la escuela, eso es preocupante. El Gobierno nacional llamó a las organizaciones porque reconoce esta situación. Esos pibes no vuelven más a la escuela y el resultado de eso lo vamos a ver en un par de años".

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