¡Llegó a Alaska en un Torino!

Hace casi tres años pasó por Neuquén, Zapala, Las Lajas y siguió rumbo a Chile en su cupé Torino blanca, modelo 1969, prometiendo llegar algún día a Alaska. Héctor Argiró contó por AM 550 La Primera -en directo desde Toronto, Canadá-, cómo ha sido este viaje, lleno de lugares, anécdotas y sueños cumplidos.

Desde aquella sensación de niño en Tucumán cuando su abuelo aceleró un Torino hasta este recorrido que ya lleva casi 80 mil kilómetros por 20 países, todo está resumido en la voz de este hombre que se emociona cuando mira para atrás y lo que le costó cumplir su sueño.

Primero fueron varios años de restauración y puesta a punto del vehículo, luego el viaje y encontrar en cada lugar a personas que lo apoyaron para seguir adelante, sin dejar de lado la emoción por ese auto fabricado en la Argentina y que despierta múltiples recuerdos.

El Torino es su casa rodante, allí viaja, come, duerme y también transporta mercadería relacionada con el desafío que vende en cada lugar y así sostiene económicamente la travesía.

“La gente de Alaska es muy parecida a la de la Patagonia”, comentó en el programa “Viaje al puerto de la noche”, especialmente “porque hay muchos habitantes venidos de otros lugares y por la solidaridad que expresan en la ruta y en los lugares donde estuve”. Argiró, un cartógrafo tucumano de 43 años, aseguró que “quiero que el auto vuelva a la Argentina, en algún momento, pero por ahora la idea es ver si continúo con el desafío de dar la vuelta al mundo”.

Precisamente, “El mundo en Torino” es el nombre que convoca a través de todas las redes sociales para conocer los detalles del viaje y también para su sostén económico.