Hoy hubiera cumplido 95 años Don Marcelo Berbel

Marcelo Berbel nació el 19 de abril de 1925 en Plaza Huincul. Fue Poeta, escritor de obras inéditas, compositor y músico folklorista de la Patagonia. Hijo de Juan Berbel y de María Teresa Arriagada, natural del Neuquén descendiente de Mapuches.

El hombre fue y es considerado uno de los poetas más influyentes de la región patagónica. Entre sus obras más notables compuso los himnos oficiales de la provincia del Neuquén (Neuquén Trabun Mapu) y de su capital (Regreso al Ayer), el primero de ellos junto al compositor Osvaldo Arabarco, conocido locutor nacional también fallecido hace algunos años.

Muchas de sus canciones fueron interpretadas por artistas reconocidos en toda la Argentina y además se difundieron en gran parte de América, abarcando diversos estilos. La Pasto Verde, El embudo, y Amutuy ("Vámonos") soledad, son algunas de sus composiciones, que han ganado gran popularidad en las interpretaciones de Jorge Cafrune, José Larralde, Soledad Pastorutti, León Gieco, Malón y Rubén Patagonia respectivamente.

Pero también compuso algunos temas con autores tales como Pablo Neruda.

EL poeta neuquino, además cumplió funciones legislativas, llegando a desempeñarse como convencional constituyente en la redacción de la constitución de la provincia de Neuquén.

Alguna vez dijo de sí mismo “Mi política es celeste y blanca y mi patria son los mapuches”, frase que lo pintaba como se decía antes, de cuerpo entero.

Marcelo Berbel, padre de los integrantes del dúo Hermanos Berbel, conformado primero por Néstor Armando Berbel ("Guchi") y Hugo Marcelo Berbel ("Chelito") y luego de la muerte de "Guchi", por "Chelito" y Marité Berbel, que llevaron a distintos escenarios del país y fuera de él, la música de la familia.

Don Marcelo Berbel, como se dice en una gran parte de la ciudadanía neuquina, falleció de una afección pulmonar en la capital neuquina el 9 de abril de 2003, y dejó la posta a las generaciones que llevan dignamente ese apellido, para que sigan mostrando su música y que además preserven su estilo.

A los demás, Marcelo Berbel  nos dejó un legado invalorable al acervo cultural del folklore argentino que debemos conservar eternamente.