CUARENTENA
La concejala que compartió un asado, golpeó a policías, y ahora renunció
Participó de un asado en una chacra, con familiares. Golpeó a policías que la fueron a apercibir por violar la cuarentena.
Valeria Casarini fue concejala hasta ayer. Durante su mandato no tuvo mayor relevancia política por sus iniciativas, pero sí un hecho que la marcó y terminó con su carrera, al menos por ahora: participó de un gran asado familiar en plena cuarentena obligatoria. Y ese hecho, fue suficiente, condena social mediante, para que renunciara, este viernes, a su banca.
La banca de concejal la ocupaba en Perito Moreno, localidad de Santa Cruz. A ella llegó por el voto de la gente integrando la lista del Frente de Todos, por un “sublema” (equivalente a las colectoras neuquinas) del sector que conduce el dirigente petrolero Claudio Vidal. La renuncia, como se suele escribir de fórmula, es “indeclinable”. Una palabra que sobra, porque a nadie se le ocurriría cuestionar la renuncia de un/a concejal/a, sea en Perito Moreno o en cualquier otro lugar de la amplia geografía argentina.
La ahora ex concejala, es además prima del actual intendente de la localidad, quien se llama Mauro Casarini. Esto es digno de ser contado: Valeria estuvo detenida seis horas el pasado 8 de mayo, luego de que en una chacra familiar hicieran el asado. Cuando fueron advertidos de la situación, es decir, de la infracción a la ley, por dos mujeres policías, la ex concejala y su hermano, que se llama Aldo, la emprendieron a golpes. Aldo, por esto, sigue detenido, acusado por “lesiones graves”.
La golpiza fue importante. Las policías fueron atendidas en el hospital local, después trasladadas a Caleta Olivia, una de ellas inconsciente. Podría quedar sorda, todavía no se sabe.
La Asociación Policial informó que se presentará como querellante en la causa, que está a cargo del juez Eduardo Quelín. Valeria Casarini dejó la banca, pero no se sabe si podrá dejar atrás esa parte de la historia, sin consecuencias.
