Preocupa la llegada de golondrinas para temporada de cerezas

La cereza será la primera producción frutícola que se cosechará en los valles en plena pandemia y para ello se necesitará de obreros golondrinas que deberán llegar a la región. La mayor preocupación, además de poder recolectarla y embalar en tiempo y forma, está en controlar a las más de dos mil personas que lleguen desde el norte de nuestro país para que no se produzca un brote de Covid que colapse el endeble sistema de salud del Valle Medio.

Chimpay se convirtió en los últimos años en la capital de la cereza. Es que la mayoría de los 3 millones de kilos que se producen en Valle Medio provienen de esa ciudad. La particularidad de este fruto es que se debe cosechar rápido y embalarlo para la exportación, por lo que la actividad debe ser intensa durante esos días. Se calcula que se deben contratar cerca de 2 mil obreros golondrinas, que como todos los años llegan al Valle Medio desde Tucumán y Salta.

Pero este año los controles deberán ser distintos. Y ya no solamente será un trámite de pedirles el documento para saber quienes son y en qué campo estarán trabajando. Además deberán cumplir una serie de requisitos para no generar un nuevo brote de Covid en la zona. 

Si bien aún no hay precisiones del comienzo de la temporada, porque se evalúa de acuerdo a las temperaturas de primavera y la humedad en el ambiente, se calcula que el inicio rondará la segunda semana de noviembre, donde deberá estar todo coordinado para poder desarrollarla sin inconvenientes.

La intención es que se haga un estricto control, con declaraciones juradas de cada uno de los obreros rurales, desde que salen de su lugar de origen hasta que lleguen a Valle Medio. Además, se acordó que las empresas deberán elaborar y presentar un protocolo que será evaluado por las autoridades, en caso de estar aprobado podrán incorporar golondrinas a la cosecha. También se definió la presencia de un enfermero laborar que será el nexo con el sistema de salud.

El Valle Medio fue el primer conglomerado de Río Negro en sufrir un brote masivo con circulación viral de Covid-19. Al no tener hospitales con terapia intensiva, los casos graves debieron ser trasladados al Alto Valle, en un momento donde todavía había capacidad en los centros de salud. En la actualidad no son muchos los casos activos que hay en ese conjunto de 14 localidades, pero una nueva ola de contagios podría ser desastrosa para la zona.