El circo que sobrevive haciendo pollo al disco

A 172 días del aislamiento social preventivo y obligatorio en todo el territorio argentino, la creatividad, los cambios de rubro y los "malabares", han sido y son claves en varios sectores de la sociedad. La pandemia no sabe de clases sociales y la economía ha impactado en casi todos los bolsillos. 

Desde aquel 20 de marzo, luego de que el Gobierno Nacional decretara la cuarentena para prevenir la expansión del coronavirus, Daniel Molina, dueño del "Circo Dihany" en Cipolletti. La pandemia no solo lo dejó con interrogantes, sino con la gran incertidumbre de cómo subsistir mientras la cuarentena continúe."Ahí la vamos llevando y seguimos con los pollos que gracias a Dios la gente nos sigue comprando y otras familias de acá del circo también se la rebuscan vendiendo budines y churros", manifestó en diálogo con la redacción de mejorinformado.com, Daniel.

La venta de pollos a la parrilla fue una de las alternativa que vio el dueño del circo junto a las seis familias (un total de veinticinco personas), que viven en los trailers en el predio ubicado en calle Mariano Moreno y San Luis. 

Sin público para sus espectáculos, "el olor a parrilla encendida" motiva a los vecinos que se acercan, piden su porción y de esa manera aportan para que de una u otra forma puedan sobrellevar estos casi seis meses de parate. 

El alquiler del predio por mes les cuesta cien mil pesos. 

Las luces y las piruetas son con barbijos, de tráiler a tráiler, los aplausos esta vez queda un número muy reducido, entre ellos, los protagonistas del circo.

Entrevista en 24/7 Noticias a Daniel Molina, dueño del "Circo Dihany":