NUEVO DEBATE
La posible nueva Ley de Alquileres preocupa a inquilinos
El proyecto presentado por Juntos por el Cambio propone contratos de un año a un precio que lo regule el mercado. Desde la Federación de Inquilinos mostraron su desacuerdo.
En medio de la incertidumbre por la ya no tan nueva Ley de Alquileres, a partir de la orden del presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa, de discutir una nueva norma, un sector de Juntos por el Cambio presentó un proyecto en el que, entre otras cosas, plantea disminuir la duración del contrato a un año y dejar el precio liberado al mercado inmobiliario.
Frente a este panorama, desde la Federación de Inquilinos mostraron su preocupación y aseguraron que lo que fracasó en todo caso no fue la ley, sino el Estado en hacerla cumplir, y que fueron los sectores políticos quienes fueron cediendo ante el negocio inmobiliario para flexibilizar la norma.
"La normativa actual fue ampliamente debatida y es una base para la regulación, que equilibra un poco la balanza entre inquilinos y el mercado", expresó el representante neuquino de la Federación. Entonces, dijo, "derogarla en lugar de modificar lo que ya tenemos, sería un gran retroceso".
El proyecto de ley firmado por Martín Tetaz, María Eugenia Vidal, Ricardo López Murphy, Emilio Monzó, entre otros, propone que los contratos duren un año. La Ley actual, propone un contrato de mínimo tres años, "que es positivo porque impacta y da una estabilidad ante el desembolso que se tenía que hacer antes cada un breve periodo de tiempo". Incluso, en un informe elaborado por el Ministerio del Hábitat, que se filtró recientemente, asegura que de esta manera se logra ahorrar hasta un mes de alquiler.
Otro de los puntos que plantea el proyecto de Juntos Por el Cambio es un ajuste mensual o trimestral de precio, que se pacte entre partes o que sea "regulado" por el mercado, en lugar de uno anual con un ajuste en base a un dato objetivo, "que con la inflación y la desactualización de los salarios daba un número alto, eso no lo negamos", aclaró Prior.
El día en que Massa planteó que la Ley no funcionaba, aseguró que se trataba del registro de los contratos en la AFIP, pero desde la Federación aseveran que esto fracasó porque el Estado no lo pudo garantizar. Como tampoco la discriminación de las expensas ordinarias y extraordinarias, la garantía propuesta por el inquilino o el alquiler social para violencia de género que, "nunca pusieron en marcha".
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