Mataron a su hermano que la cuidaba y ahora deberán pagarle

Una cipoleña de 54 años, que tras haber sufrido un accidente que la obligó a usar sillas de ruedas, deberá ser indemnizada por una Aseguradora de Riesgos de Trabajo con más de 1 millón y medio de pesos. Es que ella estaba al cuidado de su hermano, quien fue asesinado en 2016, al recibir un tiro en la cabeza cuando volvía de la chacra en la que desempeñaba tareas.

En función de la difícil situación en la que quedó la mujer, la Cámara Laboral fijó una indemnización para ella que deberá pagar la ART de su hermano. El hombre tenía 54 años y el 19 de mayo de 2016 regresaba de la chacra en la que trabajaba y en inmediaciones de la ruta 151 y el paraje Lalor, recibió un disparo que lo dejó tendido en el piso. Le robaron la moto y él quedó gravemente herido y después de tres semanas de internación, finalmente murió.

La ART ofreció las prestaciones necesarias durante el tiempo en que permaneció hospitalizado. En consecuencia, el episodio fue categorizado como un accidente “in itinere”, que son los que ocurren en el trayecto entre el domicilio particular y el lugar de trabajo o viceversa. La legislación laboral ofrece cobertura para ese tipo de hechos.

Al haber quedado desprotegida, luego de la muerte de su hermano, la mujer inició una demanda laboral y solicitó la indemnización por fallecimiento derivado de un accidente de trabajo. En general ese tipo de compensación económica es percibida por hijos e hijas o en su defecto progenitores.

Sin embargo la hermana logró probar que era la única heredera ya que el hombre fallecido, al igual que ella, eran huérfanos y además no tenía pareja ni descendientes. Para acreditar esa situación ofreció la declaratoria de herederos de la sucesión, que es una resolución del fuero Civil.

También presentó testigos que aseguraron que los hermanos vivían en la misma casa. De hecho, la mujer dependía en un ciento por ciento del trabajador rural porque ella, unos años antes, también había sufrido un accidente de trabajo que la dejó incapacitada y en silla de ruedas. Uno de ellos, aseguró que la víctima del homicidio colaboraba económicamente con su hermana desde que se fue a vivir con él en 2014 y como el pago de impuestos, medicamentos, y también con la rehabilitación.

“Se entiende que el derechohabiente estuvo a cargo del trabajador fallecido cuando concurre en aquel un estado de necesidad revelado por la escasez o carencia de recursos personales, y la falta de contribución importa un desequilibrio esencial en su economía particular”, dice el fallo laboral que aceptó el reclamo de la mujer y fijó una indemnización de 1.571.865 de pesos más intereses.