NO FUNCIONA DESDE 2017
PIAP: reactivar las instalaciones llevaría dos años
Así lo manifestó la Junta Interna de la planta, que también planteó que se le debe dar prioridad a la producción de agua pasada antes que a cualquier otro proyecto de refuncionalización.
El proceso para volver a poner en funcionamiento la Planta industrial de Agua Pesada (PIAP), que se encuentra sin actividades desde 2017, llevaría al menos entre 18 meses y 2 años. Así lo informó este martes el secretario general de la Junta Interna de la planta, Nicolas Ventura, que también indicó que la refuncionalizacion de las instalaciones “solo será viable si antes se garantiza la producción de agua pesada”.
Durante el diálogo con AM 550 y 24/7 Canal de Noticias de Neuquén, el referente de los trabajadores de la PIAP consideró que la planta “se debe poner en marcha cuanto antes” y añadió que las tareas para volver a poner en funcionamiento las instalaciones “llevarían entre 18 meses y 2 años por lo menos”.
En esa línea, Ventura precisó que se necesitarían incorporar “al menos 150 trabajadores más” para volver a lograr una producción viable en términos económicos. “Además de sumar más gente, también se debe capacitar a los operarios que vayan a ingresar, porque para operar en una planta como está, primero se necesita un año de formación”, planteó.
La semana pasada, el gobierno de la provincia de Nueuquén incluyó una partida de $1000 millones para la planta en el presupuesto de 2023, con el objetivo de iniciar su reactivación. No obstante, al ser consultado sobre este punto, el secretario general sostuvo que “aún no se nos ha clarificado para que se usarán esos fondos” y remarcó que “todo proyecto de refuncionalización que se piense, solo será viable si antes se garantiza la producción de agua pesada”, ya que todas las instalaciones están pensadas para ese fín.
Asimismo, en comunicación con el programa “Mejor de tarde”, Ventura indicó que lo central “es volver a producir agua pesada”, aunque aclaró que “los trabadores de la PIAP también estamos dispuestos a analizar otras opciones”, como por ejemplo la elaboración de hidrógeno verde o fertilizante.
Finalmente, Ventura aseguró que las centrales nucleares del país “demandarían mucha de nuestra producción”, sobre todo, porque la importación de agua pesada generaría un costo imposible de enfrentar. “La demanda está y nosotros tenemos acá la planta más grande del país para abastecerla”, concluyó.
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