Inspectores de la municipalidad de Zapala decomisaron unos 200 kilos de fiambres que muy a pesar de que estaban en evidente mal estado, se encontraban en el circuito de ventas. No obstante, esa fue sólo una de las irregularidades con las que se toparon durante el bimestre mayo - junio, en el que sacaron de circulación más de mil kilos de productos alimenticios en total.
Los agentes de la dirección de Bromatología y de la coordinación de Inspectores concentraron sus trabajos tanto en grandes superficies de ventas como en distribuidoras, con la particularidad de que “en muchos casos” precisaron camiones para poder trasladar los alimentos.
En uno de esos establecimientos comerciales dieron con yerba, fideos, jugos y arroz que estaban vencidos. Mientras que en distintas carnicerías dieron con productos que carecían de sello o de boleta, por lo que aquellos que los vendían no pudieron acreditar su procedencia.
Según se indicó desde el municipio, “ya se inspeccionó al 90%” de los supermercados, minoristas y distribuidoras consagradas al rubro alimenticio. También se apuntó que aquellos que quieran realizar denuncias sobre ventas clandestinas de carnes, pueden dirigirse a Luis Monti N 280, de 7 a 13.