Tras una audiencia realizada la semana pasada, la fiscalía terminó de exponer todas las pruebas que apuntan contra Pablo Parra, único imputado en la causa que investiga el femicidio de Agustina Fernández. Plantean que el acusado estaba obsesionado con ella, quería formalizar una relación y ella tenía una relación con otro joven. La defensa, por su parte, se opuso a las pruebas de la acusación y plantea derribarla para que se investigue como un crimen en ocasión de robo.
"La semana pasada durante una audiencia, la fiscalía terminó de exponer las pruebas que tenía. A partir de ahí comenzó nuestro derecho a oponernos y expresar las razones de esa oposición. La semana que viene expondremos nuestras pruebas y la fiscalía ejercerá su derecho. Creemos importante mostrarle al jurado que hubo una mala investigación", explicó el abogado defensor Juan Manuel Coto en el aire de Radio Mitre Patagonia.
La prueba más contundente que tiene la defensa para confirmar su tesis es el ADN que se encontró debajo de las uñas de Agustina: "Pertenece a un varón y podemos afirmar que no se trata de Parra", informó Coto.
La teoría de la defensa consiste en presentar el caso como un crimen en ocasión de robo, que tenía a Parra como objetivo principal: "Nosotros sostenemos que se trató de un robo efectuado por una persona que tenía información sobre Pablo Parra, pero le faltó un dato: su relación con Agustina. Esta persona ingresó a la casa de Parra sin saber que la víctima estaba ahí. Sustrajo varios dólares de un cajón".
Según el letrado, Parra ostentaba en redes sociales sus bienes: "Publicó en redes sociales que vendía dólares, acceder a esta información resultó bastante fácil para el delincuente".
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