La ministra de Desarrollo Humano, Gobiernos Locales y Mujeres de Neuquén, Julieta Corroza, reafirmó el compromiso del Gobierno provincial con la descentralización administrativa y el fortalecimiento de la gestión local a través del Plan Provincial de Regionalización. En una visita a Rincón de los Sauces, Corroza resaltó que “las decisiones se toman en el territorio, no desde un escritorio”, enfatizando el enfoque participativo y colaborativo que impulsa el gobernador Rolando Figueroa.
Tras ser designada como responsable de los delegados regionales, Corroza dejó de ocupar su anterior función como delegada de la región Confluencia, asumiendo el desafío de coordinar el trabajo de las siete regiones provinciales: Lagos del Sur, Alto Neuquén, del Pehuén, Vaca Muerta, del Limay, de la Comarca y Confluencia. Cada una de estas regiones articula políticas públicas inclusivas y sostenibles en conjunto con los 57 intendentes y presidentes de comisiones de fomento.
La ministra destacó la importancia de estar presentes en cada localidad, asegurando que el modelo de regionalización permite priorizar la infraestructura y el desarrollo local. Además, sostuvo que la planificación plurianual es fundamental para concretar obras públicas sin comprometer recursos futuros, garantizando una gestión eficiente de los recursos humanos y económicos.
“La regionalización refuerza el trabajo en el territorio y nos permite tomar decisiones acordes a los contextos locales”, expresó Corroza, agregando que los delegados regionales cumplen un rol estratégico en la gestión diaria, ya que colaboran en la optimización de recursos y el fortalecimiento de la integración regional.