La multinacional Red Bull continúa expandiendo su presencia en el mundo deportivo y se adentra en una nueva disciplina tras hacerse con su primera franquicia de rugby. La marca de bebidas energizantes ha completado la adquisición de los Newcastle Falcons de la Premiership Rugby de Inglaterra, marcando su debut en el deporte del balón ovalado. Aunque no se han revelado los términos financieros del acuerdo, como consecuencia de esta transacción el equipo adoptará el nombre de Newcastle Red Bulls, según reportó la BBC.
La franquicia había ocupado la última posición en la tabla durante las tres campañas más recientes y se encontraba buscando capital para asegurar su permanencia en la competición de cara a la próxima temporada. "Requerimos un socio que vaya más allá de aportar algunos millones de libras para ayudarnos a sortear la siguiente campaña. Debemos proyectarnos hacia el futuro", declaró en marzo Steve Diamond, director consultor de la institución.
La empresa de bebidas energéticas se ha posicionado como una de las compañías más dinámicas en el sector deportivo y prosigue fortaleciendo su influencia. Ya posee el RB Leipzig de la Bundesliga alemana, la escudería Red Bull Racing en la Fórmula 1 y el conjunto ciclista Red Bull-Bora-hansgrohe del circuito WorldTour, además de otros equipos de fútbol. Además, ha establecido partnerships estratégicos con Premier Padel y el Abierto de Australia, entre numerosas otras colaboraciones.