Las agencias de inteligencia holandesas y alemanas han reunido pruebas del uso generalizado por parte de Rusia de armas químicas prohibidas en Ucrania, incluido el lanzamiento de un agente asfixiante desde drones para expulsar a los soldados de las trincheras y poder dispararles. El ministro de Defensa holandés, Ruben Brekelmans, pidió sanciones más duras contra Moscú. "La principal conclusión es que podemos confirmar que Rusia está intensificando su uso de armas químicas", dijo a la agencia Reuters.
"Esta intensificación es preocupante porque es parte de una tendencia que hemos estado observando durante varios años, donde el uso de armas químicas por parte de Rusia en esta guerra se está volviendo más normalizado, estandarizado y generalizado", agregó el ministro.
Por su parte, la agencia de inteligencia extranjera alemana BND confirmó los hallazgos y dijo en un comunicado que había obtenido la evidencia junto con sus homólogos holandeses. El jefe de la Agencia de Inteligencia Militar Holandesa (MIVD), Peter Reesink, dijo que las conclusiones se basaban en "nuestra propia inteligencia independiente, por lo que lo hemos observado nosotros mismos basándonos en nuestras propias investigaciones".
Estados Unidos acusó por primera vez a Rusia de usar cloropicrina, un compuesto químico más tóxico que los agentes antidisturbios y utilizado por primera vez por Alemania durante la Primera Guerra Mundial, en mayo del año pasado. Ucrania alega miles de casos de uso de armas químicas rusas.
Rusia ha negado el uso de municiones ilegales y ha acusado a Ucrania de hacerlo. Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, dijo que el Servicio Federal de Seguridad descubrió un alijo ucraniano de artefactos explosivos en el este del país que contenía cloropicrina. Ucrania ha negado sistemáticamente tales acusaciones.
La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), una agencia de desarme en La Haya con 193 estados miembros, dijo el año pasado que las acusaciones iniciales hechas por ambos países eran "insuficientemente fundamentadas".