31° EDICION
“El Estado debe fomentar la inversión y mejorar las oportunidades”
El Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, hizo esta afirmación en el marco del Acto Inaugural de las Jornadas Internacionales organizadas por ATVC y CAPPSA.La apertura de la 31° edición de las Jornadas Internacionales organizadas por ATVC (Asociación Argentina de Televisión por Cable) y CAPPSA (Cámara de Productores y Programadores de Señales Audiovisuales) contó con la participación del Presidente del ENACOM, Claudio Ambrosini, el Jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, autoridades nacionales, provinciales, municipales, sindicales, periodistas y las autoridades de las organizaciones convocantes.
En su exposición, el Presidente del ENACOM, Claudio Ambrosini, destacó: “El Estado nunca perdió la capacidad de dialogar con todos los actores a pesar de las diferencias de los últimos tiempos. Hemos trabajado mucho en conjunto, y sabemos que ese es el camino para encontrar soluciones de consenso. Durante la pandemia nos abocamos a garantizar la conectividad para todos los argentinos. Para ello creamos una gran cantidad de Programas destinados a los sectores vulnerables. También generamos un esquema de créditos a tasas subsidiadas para las empresas. Ahora que se vislumbra el fin de la pandemia, debemos sentarnos para analizar las complicaciones que se han generado y encontrar una solución a las diferencias. Porque la única salida es entre todos. Siempre que nos pidan una reunión vamos a estar, y aprovecho esta tribuna para instar a una mesa de diálogo, para plantear los problemas, del Estado, de los privados, mediante la cual lleguemos a una instancia de éxito. Es responsabilidad del Estado construir un futuro mejor”.
El Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta expresó: “Es un gran honor para mí ser parte del principal encuentro de telecomunicaciones de la región. Es un orgullo contar con la participación de referentes y especialistas de, posiblemente, el desafío más grande que tenemos en el Cono Sur: llevar conectividad de calidad a más personas y potenciar el crecimiento de todo el sector de las telecomunicaciones. Hoy, en Argentina, la cobertura total de los servicios es cercana al 95%. Las telecomunicaciones son una industria fundamental para el desarrollo de nuestro país. La pandemia demostró la importancia de la conectividad y de contar con telecomunicaciones y contenido de calidad, sobre todo para la información, en la transmisión de certidumbre en un contexto tan duro”.
“Aún en la distancia -agregó-, las telecomunicaciones crearon puentes, achicaron barreras, nos conectaron y acompañaron a todos. Festejamos cumpleaños por Zoom, hablamos por Whatsapp con amigos, tuvimos reuniones de trabajo. Las telecomunicaciones mantuvieron firmes los lazos de afecto y generaron trabajo genuino, formal y de calidad. Todo esto fue posible gracias al compromiso de la industria: muchos invirtieron capital, hicieron obras de infraestructura, rediseñaron los espacios de trabajo, mejoraron y ampliaron sus servicios”.
“Hoy, en la Argentina, ya son más de 80 mil las personas cuyos ingresos dependen directamente de las telecomunicaciones, y 320 mil dependen indirectamente del sector. El potencial de generación de trabajo es enorme y está en marcha, y sabemos que puede crecer mucho más si mejoramos las condiciones para hacerlo. Al talento con el que contamos, debemos sumarle un Estado que entienda el mundo del S XXI, que trabaje con el sector privado para invertir de manera inteligente, que no cambie arbitrariamente las reglas del juego y garantice la estabilidad a largo plazo, que no ponga parches ni límites irracionales en los precios sino que tome medidas que fomenten la inversión y mejoren las oportunidades de los usuarios, que entienda el valor que tiene la conectividad para la información, el entretenimiento y para la libertad. Solo si logramos articular el talento de nuestra gente, el empuje del sector privado y la colaboración del Estado, vamos a lograr transformar a la Argentina en una potencia regional y mundial en telecomunicaciones”, concluyó su exposición el Jefe de Gobierno porteño.
Walter Burzaco, Presidente de ATVC se refirió respecto a los cambios regulatorios y afirmó: “Por alguna inexplicable razón, al menos para nosotros, en medio del diálogo y el trabajo conjunto, el Gobierno dictó el DNU 690 calificando a nuestros servicios como públicos y dispuso también un congelamiento unilateral de nuestros precios. Congelamiento ajeno a la realidad de nuestros costos, inadecuado por la necesidad de continuas inversiones para expandir y mantener las redes ante el aumento de la demanda, y a contramano de la situación económica en general”.
“El INDEC le da cifras concretas a lo que hemos enunciado. En su comparación interanual al mes de agosto: la inflación alcanzó el 51,4%, pero el rubro comunicación apenas llegó a la mitad: 26,4%. Por otro lado, la problemática descripta se ve reflejada en que las inversiones se redujeron un 50% en moneda constante, entre el año 2018 y el año 2020. El DNU también dispuso un cambio de reglas inédito: calificar de servicio público a un sector que nació y se desarrolló en competencia. Junto a la decisión hubo definiciones y descripciones injustas sobre el desempeño de una industria que tiene más de 1.200 operadores independientes”.
El directivó explicó que la intención declamada por el DNU, de zanjar la brecha digital o hacer universal el acceso, no se alcanza por medio de dos palabras: “servicio público”. “Y resultan extrañas en un país donde el agua, las cloacas y el gas, siendo servicios públicos, denotan carencias y una falta de cobertura notoria y verificable. Pero, cuando hablamos de los servicios TIC, según los propios datos del INDEC, el 90% de los hogares del país cuentan con al menos una conexión a Internet, sea fija o móvil, argumentó.
“En esta calificación, junto al congelamiento de precios impuesto, radica la génesis de nuevas desigualdades que aventajan a los sectores más pudientes por encima de los necesitados. Al congelar todos los servicios, se impide que se compita en los de gama media y alta, es decir, en servicios para los sectores con mayor capacidad adquisitiva. La discusión sobre el DNU excede el marco de las consideraciones legales. Su impacto es fáctico y sus resultados lo tornan regresivo para el desarrollo de un país que precisa la inclusión digital y el ingreso a la sociedad del conocimiento, si en verdad queremos ser parte del concierto de países desarrollados. El DNU no solo afecta a un sector, también niega oportunidades a la totalidad del cuerpo social”.
“Es aún más complejo interpretar la regulación y el yugo sobre un sector que invierte en dólares y cobra en pesos, que genera empleos calificados en todo el territorio, que es uno de los principales contribuyentes y que reinvierte en infraestructura de redes para beneficio del país, frente a la libertad otorgada a quienes prácticamente no generan empleos, casi no tributan en el país, cobran en dólares y no aportan inversiones. Una extraña suma cero que pasa desapercibida. Me refiero a las plataformas de contenidos y a las redes sociales. Usan las redes de nuestras empresas gratuitamente, tensionan la capacidad de estas, provocan ingentes aumentos en la demanda del ancho de banda y nos obligan a invertir constantemente para que los abonados reciban calidad. En tanto que el congelamiento, la crítica, las diatribas y la eventual queja de un usuario caen en los que tenemos congelados los precios y los costos en aumento”.
“Es imperativo salir de esta situación por medio del acuerdo, es responsabilidad del Gobierno y del sector dejar la confrontación para potenciar el desarrollo del país, creando nuevas oportunidades y construyendo un futuro mejor”, concluyó Burzaco.
Al respecto, Sergio Veiga, Presidente de CAPPSA, acordó “Debemos evitar regulaciones como el DNU 690 que afecta a un sector en competencia y fundamental para el desarrollo del país. Un sector que afronta desafíos por las nuevas condiciones internacionales y que debe realizar inmensas inversiones para estar a la altura”.