La final del Mundial de Clubes 2025 dejó un campeón contundente y un escándalo sin precedentes. El Chelsea aplastó al Paris Saint-Germain por 3 a 0 con autoridad futbolística, pero todo quedó opacado por la violenta reacción del entrenador del PSG, Luis Enrique, quien tras el pitazo final agredió al delantero brasileño João Pedro en pleno campo de juego.
El momento fue captado por las cámaras del estadio y se volvió viral en cuestión de minutos. João Pedro, de apenas 23 años, fue uno de los puntos más altos del Chelsea en el partido, y aparentemente habría cruzado algunas palabras con el DT español que no cayeron nada bien. Luis Enrique, visiblemente alterado, lo encaró al centro del campo y sin mediar demasiado lo agredió con un golpe certero al rostro.
Lo que debía ser una postal de celebración para el equipo inglés terminó siendo una batalla campal. Jugadores, asistentes y personal de seguridad intervinieron rápidamente para separar a los involucrados.
Desde lo deportivo, no hay discusión. El equipo londinense dominó el partido de principio a fin, con presión alta, juego vertical y eficacia ofensiva. El PSG, por el contrario, lució desbordado, sin ideas ni reacción. El 3 a 0 fue una radiografía perfecta de lo que pasó en el campo: un equipo con hambre de gloria y otro que no estuvo a la altura de lo que venia demostrando en el torneo.
La acción violenta de Luis Enrique no solo es una mancha para su carrera, sino también para la imagen institucional del PSG, que ya arrastra críticas por su eterna deuda en el plano internacional.