Una historia de amistad, sangre y perdón

Un juicio abreviado por un intento de asesinato tuvo un tan poco frecuente alegato final de la víctima, que llevó a los acusadores y al juez a imponer la pena más benigna para esa figura penal, y hasta acceder a un pedido del imputado. El hecho marcó un hecho sin precedentes en el Poder Judicial de Chubut.

El caso que se juzgó ocurrió el 22 de mayo de 2021en la localidad de Trelew en una casa ubicada en el barrio Armada Argentina. Allí se desarrolló una reunión gastronómica que comenzó la noche del 21. El anfitrión, José Antonio Ruiz, y su amigo de toda la vida, Diego Oria entre otras personas, compartieron una cena.

Finalizado el encuentro, a eso de las cinco de la madrugada, Oria comenzó a recibir en su teléfono celular mensajes de audio y escritos provenientes del aparato de Ruiz. Todos ellos amenazantes e incitándolo a pelear.

Oria conocía desde muy chico a Ruiz. Habían sido amigos desde la infancia por lo que accedió al encuentro. Se subió a su auto acompañado por otras dos personas y se dirigió a lo de Ruiz.

Llegó a la casa, estacionó, y sus acompañantes se quedaron en el auto. Oria s bajó, tal vez pensando que el entredicho podría arreglarse fácilmente. Sin embargo cuando estaba cerca de Ruiz, quien lo esperó en la vereda, sin que mediara palabra alguna recibió una certera puñalada que le afectó gravemente el corazón. El agresor tenía oculto el cuchillo bajo la campera.

Oria fue llevado de urgencia al hospital y Ruiz quedó detenido.

La víctima tardó un buen tiempo en reponerse y la Justicia aprobó la iniciación del proceso judicial contra Ruiz por homicidio en grado de tentativa.

Este viernes, día de iniciación del juicio, el fiscal Gustavo Núñez y el defensor Javier Allende acordaron un procedimiento abreviado en el que Ruiz estaba dispuesto a asumir su responsabilidad en el episodio.

Al dar a conocer el acuerdo Núñez destacó el consentimiento brindado por la víctima, quien se encontraba a su lado, y que permitió decidir el caso a través del juicio abreviado. En la audiencia, el fiscal le cedió la palabra a la víctima.

Dirigiéndose al juez Gustavo Castro, Oria manifestó: “mi postura con relación al caso es respecto a que actitud tener ante un hecho que ya tiene un año y medio y me nace la responsabilidad de pensar un poco en José, y que él tenga las herramientas que necesita para poder salir de esta situación de otra manera y que tenga la oportunidad de rehacer su vida, porque no la estaba llevando bien. Para mí es indistinto el tiempo que pueda permanecer en prisión, siempre que le sirva a él para poder reinsertarse en la sociedad de una manera mejor, con otras herramientas”.

Y luego, dirigiéndose a su amigo le expresó: “José, yo te perdono, así que quedate tranquilo… yo te perdono”.

Tras escuchar a las partes, que resaltaron la actitud de la víctima, el juez Castro resolvió la homologación de lo presentado y la imposición de una pena a 4 años de prisión. Pero, además, pidió a las autoridades penitenciarias que Ruiz no sea trasladado a una cárcel, sino que permanezca en una alcaidía policial para que pueda continuar y terminar sus estudios.