Una propiedad abandonada que era utilizada por los delincuentes para que quienes viven allí puedan esconder lo que robaban y refugiarse, fue derribada por personal municipal, en el marco de un nuevo operativo que la comuna llevó adelante para desarticular este tipo de viviendas, que son blanco de la criminalidad.
Esta vez la demolición se dio en la calle Pastor Bowlder y Brasil, del barrio Luis Piedrabuena. Las denuncias de los vecinos hicieron que desde la municipalidad aceleraran los trámites, para proceder a derribar el lugar.
La demolición se dio luego de un seguimiento judicial, que dejó en claro que el lugar desde hacía años estaba sin moradores y sin que nadie se hiciera cargo de su mantenimiento y del pago de los tributos.
Con otros espacios se usó la misma política, como una vivienda en Pastor Bowlder al 800 (casi Chile) que se derribó el 14 de abril, y otra ubicada en el área céntrica: Alem casi Brentana, que se demolió el 16 de ese mes.
A través de una gacetilla explicaron que “el intendente Rodrigo Buteler puso entre sus prioridades la liberación del espacio público que pueda ser utilizado por la delincuencia”.