REZO POR VOS
"San Lionel", el altar de Messi en el centro de la ciudad
¿Lo conocés? En un rinconcito estratégico de un bar céntrico de Neuquén, levantaron un altar para pedirle a San Lionel que nos traiga la Copa.
La hamburguesería está en llamas, ante cada triunfo de la Selección Nacional la cosa se pone caliente. Hay festejos, calor humano, la gente entra y sale, brinda, se sacan selfies. Desde hace un tiempo el bar Flamas, de Emi Meier, es un punto de encuentro a pasitos del Monumento. Pronto va a cumplir dos años y los que lo conocen saben que ante cada fecha especial en el bar siempre se vive una fiesta. Pasó con el Día del Amigo, la Primavera, Halloween, la Copa América y ahora, el Mundial.
Para palpitar el certamen futbolístico más importante del mundo redoblaron la apuesta. Decoraron todo de celeste y blanco, le dieron una nueva vida a la fachada con un mural con la cara de la Pulga, y casi sin quererlo, levantaron un altar para venerar al 10, que tiene decenas de objetos cabuleros bien argentos.
El altar se convirtió en parada obligada de todos los hinchas que salen a festejar, y ahora hasta muchos le piden que el bar abra antes para dejarle un amuleto o hacer una promesa, previo a cada partido.
OJALA QUE SÍ
En una conversación muy millenial, con audios que llegan desde el otro lado del mundo, Emi nos cuenta cómo surgió esta “experiencia religiosa”.
“Todo empezó con la Copa América, nos fuimos copando con festejar los logros de la Selección y con la intención de rendirle homenaje a Messi. Empezamos pegando una foto en un rincón del bar que tiene justo un estante, le prendimos velas, la gente se fue enganchando, empezó a llevar cosas y se generó algo colectivo muy bueno. Cuando salimos campeones de América hicimos un gran evento en el bar, todos los mozos vestidos con camisetas, fue una fiesta”, cuenta su dueño.
A partir de ahí el altar fue tomando más forma, lo fueron alimentando con nuevos objetos, hicieron fotos, videos para sus redes, y se dieron cuenta de que incluso la gente que pasaba por la puerta se paraba a mirar.
No había dudas había que hacer algo más para seguir alentando y le metieron, renovando además la estética en el frente del local. “Nos copamos con la mística que tiene el Mundial y en seguir celebrando. Nuestro bar es para pasar buenos momentos y vimos que el altar generaba eso. Asique mandamos a hacer una estampita que repartimos entre los clientes que vienen, y también nos juntamos con Jota Bardo que pintó un mural tremendo en la entrada, con la cara de Messi y la llama en los ojos”, resume contento.
MANTENLO PRENDIDO FUEGO
Te preguntarás, ¿qué más tiene este altar pagano y futbolero? “La foto de Maradona no falta, la del “Huevo” Acuña tampoco. También hay figus de Messi del álbum, una caja de vino con la cara de los jugadores, la bandera Argentina y de Neuquén, más velas, cornetas, remeras, posters, de todo. Hasta un vaso de coca viejísimo con diseño mundialista que me dieron mis abuelos cuando les conté de la movida”, describe.
“La idea es llenarlo de cosas que nos representen, que nos traigan suerte. Cada uno puede pasar y traer su ofrenda con la mejor onda. Después del partido con Arabia Saudita vino una persona con una planta de ruda, y funcionó”, asegura Emi. Habrá que creer.
La invitación está hecha. Pasar por el bar, tomarse una birra e hincarse a rezar. Sólo queda un interrogante: ¿La Iglesia Maradoniana aceptará este nuevo culto?
