Florencia Labraña, conocida como “la profe Petty”, es una docente neuquina que enseña en la Escuela Primaria Nº 106 de Plottier. Allí, lidera el Proyecto de los Días Viernes, una propuesta que impulsa salidas escolares por distintos circuitos de la ciudad junto a otras instituciones educativas rurales. Pero fue en esas caminatas donde notó una dificultad: algunos estudiantes con discapacidad motriz no podían sumarse a la experiencia.
Con una visión inclusiva y un fuerte compromiso pedagógico, Florencia decidió aprender herrería en el Centro de Formación Profesional Nº 14. Allí construyó, con materiales reciclados, una “monocleta”: un monociclo con silla adaptada para senderismo, inspirado en modelos como la Joëlette europea o la Champa Bike, pero hecho con el sello local de manos neuquinas.
La primera vez que utilizaron la silla fue un momento inolvidable: “Finalizamos todos con lágrimas, por lo menos los adultos”, contó emocionada. Desde entonces, el dispositivo inclusivo recorrió los caminos del Jardín Botánico y llegó hasta los senderos de la barda.
Pero el sueño no termina ahí. Florencia ya proyecta una nueva versión que le dé autonomía total al usuario, sin necesidad de asistentes. Mientras tanto, su creación no solo cambia la vida de sus estudiantes, sino que también inspira a colegas y a la comunidad. De hecho, otros profesores ya le han pedido prestada la bicicleta, y ella solo les pide algo a cambio: donaciones de materiales para seguir construyendo más dispositivos inclusivos.
Educación, inclusión, reciclaje y compromiso comunitario se funden en este proyecto único, que demuestra que enseñar también es transformar realidades.