El simbolismo que tiene el 6-3, 6-3 y 6-4 del italiano Jannik Sinner sobre Novak Djokovic, trasciende a la final soñada por las estadísticas actuales en Wimbledon y que se terminará dando el próximo domingo contra el español Carlos Alcaraz.
Es que el cruce del actual número 1 y 2 del mundo en la catedral del tenis hasta resulta lógico por las condiciones de ambos y el momento pleno de su juego en la temporada 2025. Sin embargo, el último bastión del trío mágico junto al español Rafael Nadal y el suizo Roger Federer se acaba de quedar afuera de su final en Inglaterra después de 8 años ininterrumpidos.
Quitando la edición del 2020 que no se desarrolló por la maldita pandemia, Djokovic conquistó el Gran Slam sobre césped en 2018, 2019, 2021 y 2022 de manera consecutiva. En 2023 y 2024 jugó la final, justamente ante el bicampeón Alcaraz que el domingo irá por su primer tridente inglés.
La partida del serbio en semis pudo haber sido su última aparición en el All England, todo un simbolismo de la nueva era que ya ha comenzado en el tenis ATP, pero que llena de nostalgia a los fanáticos.
Italiano fantástico
Con su clasificación a la final de Wimbledon, Sinner la final de Wimbledon, la única que le falta experimentar desde su irrupción en el circuito.
La nueva marca del número 1 del mundo no se alcanzaba desde 1995. Sólo Federer, Nadal, el propio Djokovic y el británico Andy Murray habían sido capaces de un hito semejante.
Pero lo que moviliza por estas horas al europeo es desquitarse del español, quien recientemente la ganó el partido decisivo en Roland Garros. Para el italiano será la chance de alzar por primera vez el Gran Slam inglés, pero ya tiene dos grandes de Australia y un US Open.
Alcaraz, por su parte, eliminó en semis al estadounidese Taylor Fritz con mucho trabajo. El éxito del ibérico fue en cuatro sets porque, aunque arrancó ganando el primero 6-4, luego perdió en el segundo 5 a 7. En el tercero dominó cláramente 6 a 3 y en el cuarto y definitivo se le puso muy complicado, debió recurrir al tie break para llevarselo allí 7-6 (8 a 6) y esperar por la final.