POLÉMICA
La justicia paraguaya investigará al senador Kueider por lavado y contrabando
El legislador entrerriano fue detenido con más de 200 mil dólares, pesos argentinos y guaraníes no declarados.La justicia paraguaya reforzó la investigación contra el senador nacional argentino Edgardo Kueider con la conformación de un equipo de tres fiscales, liderado por Edgar Benítez, a quien se sumaron Alcides Giménez Zorrilla y Gabriel Segovia Villasanti. El Ministerio Público de Paraguay definió esta estrategia debido a la complejidad del caso, que involucra presuntos delitos de contrabando y lavado de dinero.
Kueider fue detenido en Ciudad del Este tras cruzar a Brasil para cenar y regresar a Paraguay. En un control fronterizo, las autoridades descubrieron que transportaba divisas no declaradas. Según el fiscal Benítez, la detención busca garantizar la continuidad del procedimiento legal, mientras se decide el futuro procesal del legislador.
La defensa de Kueider: "el dinero no le pertenece"
El abogado del senador, César Nider Centurión, sostuvo que el dinero hallado pertenece a una empresa paraguaya y fue entregado a Iara Guinsel Costa, secretaria de Kueider, para realizar compras en Ciudad del Este. Según el letrado, ambos llevaban el dinero consigo por razones de seguridad, al decidir cenar en Foz de Iguazú debido al cierre del restaurante de su hotel.
La defensa también aclaró que el vehículo decomisado pertenece a un ciudadano argentino y que Costa tiene autorización legal para conducirlo en territorio paraguayo y argentino. Guinsel Costa, también detenida, sería allegada al legislador, aunque reside en Asunción.
En medio del escándalo, Kueider anunció que pedirá licencia a su cargo de senador para permitir que la investigación avance sin interferencias. Desde su bloque, Las Provincias Unidas, respaldaron esta decisión, subrayando que “todos los funcionarios públicos deben someterse a la Justicia”.
El caso generó divisiones políticas. Cristina Kirchner calificó a Kueider como un “peronista que pasó a votar como libertario” y apoyó el pedido de expulsión del Senado, presentado por miembros de su interbloque, bajo el argumento de “inhabilidad moral sobreviniente”. Por su parte, el presidente Javier Milei desvinculó a su gobierno del legislador, calificando el caso como “un problema del kirchnerismo”.