Juan Darthés deberá cumplir una condena de seis años en un régimen semiabierto tras la confirmación de su culpabilidad por parte de la Justicia de Brasil en el caso de violación contra Thelma Fardin. Este tipo de cumplimiento de pena permite ciertas flexibilidades bajo supervisión, como la posibilidad de salir durante el día para trabajar o estudiar, pero con la obligación de regresar a prisión por las noches.
El caso comenzó en 2018, cuando la actriz argentina denunció públicamente a Juan Darthés por abuso sexual durante una gira de la serie juvenil "Patito Feo" en Nicaragua en 2009. En ese momento, Thelma Fardin tenía 16 años y el actor, 45. Luego de la denuncia, Darthés se radicó en Brasil, país donde nació y que no permite la extradición de sus ciudadanos, lo que llevó a que el proceso judicial se desarrollara en territorio brasileño.
Según el Código Penal de Brasil, el régimen semiabierto otorga a los condenados la posibilidad de desempeñarse en actividades laborales o educativas en lugares específicos, como colonias agrícolas o centros de formación profesional. No obstante, estos permisos están sujetos a estrictas condiciones de control y monitoreo, incluyendo el uso de tobilleras electrónicas para el seguimiento de los movimientos del condenado.
En algunos estados brasileños, debido a problemas de infraestructura en el sistema penitenciario, el régimen semiabierto se sustituye por prisión domiciliaria, lo que podría significar un cambio en la forma en que Juan Darthés cumple su condena. Sin embargo, las autoridades judiciales aún deben definir en qué circunstancias exactas llevará adelante su pena.
Tras conocerse la ratificación de la condena, Thelma Fardin se manifestó en sus redes sociales con un mensaje cargado de emoción. En un video, la actriz expresó: "Es un día muy movilizante para mí. Estoy en San Pablo, acabo de salir de la audiencia del juicio donde cinco jueces volvieron a encontrar culpable a mi abusador". Sus palabras reflejan el largo camino que atravesó desde su denuncia inicial en 2018.
Thelma Fardin también destacó la importancia del fallo, no solo a nivel personal, sino como un mensaje para otras víctimas de violencia sexual. "Escuchar que mi palabra valió la pena después de todos estos años de lucha es reparador", afirmó, subrayando las dificultades que enfrentó en un proceso judicial extenso y mediático, marcado por la revictimización y el escrutinio público.
El caso de Thelma Fardin involucró a tres países –Argentina, Brasil y Nicaragua– y contó con el testimonio de 11 personas que declararon de manera virtual. La sentencia de junio de 2024, que ahora ha sido ratificada, representa un avance significativo en la lucha contra la violencia de género en América Latina y sienta un precedente para futuros casos de abuso dentro de la industria del entretenimiento.
Con este fallo, la justicia brasileña dejó firme la condena y consolidó la validez de las pruebas presentadas. El desenlace del caso marca un punto clave en la historia judicial de la región, demostrando que la voz de las víctimas puede ser escuchada y respaldada por el sistema legal.