¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

Miércoles 18 de Junio, Neuquén, Argentina
Logo Am2022

El narquito Gil: lo vieron en las cámaras vendiendo cocaína y armado con un cuchillo

Esta madrugada la policía de Neuquén interceptó a un sujeto que parecía haberse olvidado que lo estaban mirando las cámaras del Centro de Monitoreo Urbano (CMU).

Por Redacción

Miércoles, 18 de junio de 2025 a las 13:18

En una postal cada vez más clásica del submundo barrial, esta madrugada la policía de Neuquén interceptó a un sujeto que parecía haberse olvidado que lo estaban mirando desde arriba. Y no precisamente desde el cielo, sino desde las cámaras del Centro de Monitoreo Urbano (CMU), que lo captaron mientras merodeaba por Antártida Argentina y Cipolletti con pinta de estar tramando algo más que una caminata nocturna.

Y sí, lo que tramaba era narquiar. Porque cuando los agentes de la Comisaría Tercera lo frenaron, lo primero que reconoció —con una sinceridad que ni su madre le conocía— fue que llevaba un cuchillo tipo parrillero escondido en la cintura. ¿Un asado improvisado a las 2 de la mañana? Poco probable. Pero esperá, que mejora.

Mientras los uniformados hacían la identificación, nuestro protagonista —un adulto mayor de edad con escasa noción del perfil bajo— decidió sacar del bolsillo una balanza de precisión y dos envoltorios sospechosos. Lo que se dice, “yo me incrimino solito, oficial”.

Ahí entró en escena la división Antinarcóticos, que confirmó lo obvio: los envoltorios contenían 0,9 gramos de clorhidrato de cocaína. También le secuestraron la balanza (negra, con bandeja plateada, bien de laboratorio casero) y el cuchillo, que, lamentablemente para él, no tenía carne ni chorizo alrededor.

El kit del microdealer

  • 1 cuchillo tipo parrillero (ideal para intimidar o cortar vacío).

  • 1 balanza de precisión (para que no falte ni sobre ni una raya).

  • 0,9 gramos de cocaína (el límite entre la cana y la risa).

  • Y, claro, una falta de sentido común que asombra.

¿Y cómo terminó la historia?

Pese a la intervención policial y el hallazgo, el hombre fue notificado por infracción a la Ley 23.737 (la de Estupefacientes), pero no fue detenido. Quedó en libertad ambulatoria, como si hubiera salido a comprar pan con cuchillo incluido.

La policía celebró la rápida actuación del CMU y la coordinación entre sus divisiones. Pero lo cierto es que lo que más celebramos todos es que, aunque no sea Netflix, las cámaras de la ciudad siguen revelando que hay narquitos que no terminan de entender que ya no hay esquina sin ojos.

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD