La conducción del gremio docente UnTER confirmó que este martes se retomará el diálogo paritario con el ministerio de Educación en una instancia clave para definir el futuro del ciclo lectivo tras el receso invernal. El encuentro se realizará en la sede de la Secretaría de Trabajo en Viedma, y contará con la participación de representantes del Consejo Directivo Central del sindicato, entre ellos la secretaria general Silvana Inostroza y el secretario adjunto Gustavo Cifuentes. En la previa, Cifuentes expresó en AM 550 y 24/7 Canal de Noticias que “retomar el diálogo es importante, pero vamos con mucha expectativa. Necesitamos una propuesta que no deje a ningún docente por debajo de la línea de pobreza”.
El dirigente gremial remarcó que la mayoría de los docentes tiene un solo cargo, y que quienes recién se inician están cobrando alrededor de $1.030.000, una cifra que no alcanza para cubrir la canasta básica total, estimada por el INDEC en más de $1.100.000. Además, denunció que el sector fue discriminado del resto de los estatales, que sí recibieron un bono extraordinario de $40.000 en junio. “Fuimos excluidos sin explicación. Es una provocación más del gobierno, que profundiza el conflicto con una confrontación permanente”, señaló Cifuentes, en línea con lo expresado por Inostroza en encuentros previos con el gobernador Alberto Weretilneck.
Desde UnTER insistieron en que la propuesta salarial debe contemplar un porcentaje remunerativo, por cargo, y con criterio del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), para que repercuta de manera escalonada y evite el achatamiento de la pirámide salarial. También reclaman que se contemple la movilidad docente, especialmente en zonas rurales y de difícil acceso. “Esperamos una propuesta analizable. No queremos parches ni sumas en negro. Queremos recomposición real”, expresó Cifuentes. El gremio ya tiene convocado un congreso provincial para este viernes en Roca, donde se evaluará la oferta del gobierno. Si no hay avances concretos, se podría ratificar el paro de 48 horas y el no inicio de clases previsto para la próxima semana.
El conflicto docente se arrastra desde junio, cuando el gobierno liquidó los sueldos con descuentos por los días de paro del 17 y 18, y excluyó al sector del bono otorgado a otros trabajadores estatales. En ese contexto, UnTER realizó jornadas de protesta, paros provinciales y movilizaciones, con una adhesión que superó el 80% en toda la provincia, según datos del gremio. Además, se denunció el deterioro de las condiciones edilicias, la falta de inversión en infraestructura escolar y la vigencia de resoluciones que sostienen auditorías médicas restrictivas.