Con el Mundial de Clubes aún en disputa en Estados Unidos, FIFA comenzó a proyectar lo que será la 2ª edición con este formato para el 2029, justo en la antesala que tendrá al Mundial de Uruguay, Paraguay y la Argentina, como festejos del centenario de la federación internacional.
Allí es donde toma fuerza que el mismo triunvirato tome posesión de la competencia de clubes que se ha convertido en un suceso, aunque no con entradas agotadas en todos los estadios como sí se produciría por estas latitudes.
La intención de Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, es concentrar las dos máximas fiestas del fútbol por estas tierras en un período reducido de meses, aunque también hay otros candidatos.
Brasil, por intermedio de su nuevo presidente Samir Xaud, ya se candidateó solito. Choca con la crisis que atravesó la Confederación Brasilera de Futbol (CBF), aún no superada y con varias investigaciones por parte de FIFA, ejemplo en el contrato de Carlo Ancelotti como nuevo entrenador de la Selección mayor.
Y desde Asia presionan a fuerza de billetes y un mercado millonario en simpatizantes que siempre es de gran atracción para los grandes de Europa, la FIFA y el inmenso universo de sponsors que se abre ante esa posible visita.
Cambio de fecha
La otra cuestión en análisis tiene que ver con la fecha en que se organizará, ya que junio ha sido un dolor de cabeza para los grandes nombres europeos, en el final de una temporada ya plagadísima de encuentros oficiales.
La ventana internacional se generaría para que en diciembre de 2028 o enero del 2029 se desarrollen todos los partidos.