A los 47 años, falleció en la tarde del lunes Alejandra “Locomotora” Oliveras, símbolo del boxeo femenino y argentino, dejando un legado imborrable no solo arriba del ring, sino por su mensaje motivacional, para generaciones venideras dentro del boxeo, y para la vida cotidiana. fueron varias las visitas a la provincia, dejando el claro mensaje de "No tengan miedo, sean ustedes mismos".
Oliveras fue dueña de seis títulos mundiales en cinco categorías diferentes, siendo la primera boxeadora en la historia en conseguirlo, entrando al libro Guinness. A lo largo de sus 38 peleas, que terminaron en 33 triunfos, dos empates y tres derrotas, se fue convirtiendo en un ícono de superación a base de esfuerzo y dedicación. Ya retirada del ring, se mantuvo en forma y comenzó a recorrer el país dejando su mensaje.
En Neuquén, su visita se dio en reiteradas oportunidades, de la mano del promotor Miguel Serraiotto, quien la trajo para diferentes eventos boxísticos en Senillosa, Plottier, Cutral Co. “La única mujer que se hizo reconocer ella mismo, agarró el bolso y salió, sin promotores. Llegó a la cima sola. Murió en su mejor momento y abrió un camino que dejará precedentes” la recordó el promotor local, quien agregó además que “Estuvimos muy cerca de cerrar una pelea en Plottier pero nos faltaron algunas cosas”.
“Era una mujer muy impulsiva, muy natural. Le tengo una profunda admiración porque el cariño de la gente es todo mérito de ella y haciendo alarde a su forma de ser; una mujer normal que le costó todo el doble mantenerse y entrar en su carrera política fue todo mérito de ella, se ganó su lugar y eso quedará marcado. Para ella no había diferencia, eran todos iguales, y la mujer era capaz de todo. Terminó motivando a la gente hasta su último día”
En sus diferentes visitas en la zona, “Locomotora” Oliveras visitó no solo veladas, sino tuvo charlas con jóvenes boxeadores zonales de ambo sexos, “tenía un dicho muy particular: ´Levántate, no te quedes, disfruta la vida y no tengas miedo, con la muerte algún momento nos vamos a chocar, todo lo demás tiene solución´ agregando además “Le pedía siempre a los chicos que sean ellos ´sean ustedes, y vivan el día como si fuera el último´.
Entre tantas anécdotas, Miguel recuerda diferentes charlas “Estábamos comiendo en Cutral Co, se acerca una señora a pedirle una foto y de la nada saca un pintalabios del bolsillo y dice ´ante todo femenina ‘y si pinta ahí nomás para la foto. Alejandra era muy espontánea y había que quererla como era, una “loca linda”
Un accidente cerebrovascular (ACV) isquémico fue el detonante del fallecimiento de Alejandra “locomotora” Oliveras, quien ese mismo día del accidente, debía asumir en la Convención Reformadora de la Constitución provincial de Santa Fe.