El Gobierno de la Provincia del Neuquén, a través del EPAS, dio inicio a una de las obras más esperadas por los vecinos de la meseta neuquina. Se trata de la ejecución de un acueducto que llevará agua potable desde la planta potabilizadora de Mari Menuco hasta los barrios del sector norte de Neuquén capital y el sur de Centenario, donde aún no existen redes formales. La iniciativa busca asegurar el acceso al recurso las 24 horas, los 365 días del año.
La obra contempla la instalación de más de 9 kilómetros de cañerías a lo largo de la meseta, con 31 puntos de distribución pública donde los vecinos podrán abastecerse. Para su concreción, ya comenzaron los trabajos de zanjeo y excavación por parte de la empresa contratista. Estos sectores actualmente dependen de camiones cisternas, lo que limita el acceso constante al agua potable.
Con una inversión estimada en 1.600 millones de pesos, la construcción del acueducto demandará un plan de trabajo de 210 días. Además, se prevé la instalación de las bases necesarias para que, en una segunda etapa, los barrios en proceso de regularización puedan conectarse directamente a la red. Esto incluirá a El Mirador, El Jarillal, El Choconcito, San Antonio I y II, y El Trébol II.
El proyecto incluye también la edificación de una estación de bombeo en la cisterna de 6.000 metros cúbicos de Mari Menuco y la ejecución de un acueducto de impulsión. Esta infraestructura permitirá mejorar el abastecimiento actual y sentar las bases de una solución definitiva para la falta de servicios básicos en la zona.
“Estamos llegando con servicios esenciales para vecinos que estaban postergados, con una demanda histórica de necesidades primarias”, afirmó Gustavo Hernández, presidente del EPAS. Y concluyó: “Una vez más, el Gobierno de Neuquén está presente donde debe estar, garantizando igualdad a todos los vecinos de la provincia”.