El Centro de Predicciones Climáticas de los Estados Unidos adelantó que el fenómeno de La Niña podría volver a estar presente en Argentina y Brasil para finales de año. Esto afectaría en matera productiva y también generaría la continuidad de los bajos niveles del Río Paraná.
El nivel del río Paraná continúa descendiendo en varias ciudades de Entre Ríos y sigue lejos de su altura promedio, según informó el Instituto Nacional del Agua que agregó que se espera que esa tendencia “desfavorable” permanezca hasta el 30 de septiembre, e incluso podría extenderse hasta enero del 2022.
La bajante extraordinaria tiene “una perspectiva al 30 de septiembre netamente desfavorable, con probabilidad cierta de extenderse en los subsiguientes cuatro meses, por lo menos”, aseguró el INA. Asimismo, el organismo nacional apuntó que julio será “especialmente crítico, con afectación de todos los usos del recurso hídrico”, principalmente en la “captación de agua fluvial para consumo urbano”.
Por eso mismo se encienden las alarmas ante el probable regreso de La Niña.
La Niña es un fenómeno que produce un enfriamiento a gran escala de la temperatura de la superficie del océano en las partes central y oriental del Pacífico ecuatorial, además de otros cambios en la circulación atmosférica tropical. Según señaló Patricio González, agro climatólogo de la Universidad de Talca, "el fenómeno implica un bloqueo de precipitaciones en diversas regiones como en parte de Argentina, Paraguay y el sur del Brasil donde yace uno de los principales polos de producción agropecuaria del mundo".