En las últimas horas un médico argentino compartió la historia de uno de sus pacientes en la que contaba cuán arrepentido estaba por estar totalmente en contra y no haber creído en la eficacia de los inoculantes. Mario Fitz Maurice, jefe de arritmias del Hospital Rivadavia de Buenos Aires, quien al ver la desesperación de la persona que atendía, aprovechó la ocasión para publicar el crudo relato en sus redes sociales.
.
“Mi hermana no está evolucionando bien. Los médicos dicen que el oxígeno es muy bajo aún con el respirador y dada vuelta”, fueron las primeras palabras del relato desesperado, que se llevo a cabo mediante una serie de mensajes de WhatsApp entre el médico y el familiar de un paciente de covid-19. “Me siento muy culpable por haberle dicho que no se vacune ¿Si le doy ya una vacuna la ayudará?”, preguntó el pariente de la mujer de 53 años que se encuentra intubada en estado crítico.
.
"Doctor, no quiero que se muera mi hermana. Fui un boludo, pero necesito que me ayuden. ‘¡Por Dios!’”, escribio desesperado el hombre. En su publicación, el profesional de la salud, dio su opinión sobre el hecho e instó a sus seguidores a reflexionar sobre las consecuencias de no seguir las indicaciones que las autoridades sanitarias recomiendan. “Esta negación a las vacunas tiene que ver, inicialmente con ignorancia; luego llegó de parte de gente que se opone a todo, no importa cuál sea la evidencia, y ese porcentaje de gente existe en la mayoría de los países. Por suerte, en la Argentina no fueron demasiados porque la gran mayoría de la población aceptó las vacunas, aunque esa pequeña minoría es ruidosa y quiere llegar a sobresalir yendo en contra de las mayorías”.