Marcela Acuña, una de las acusadas por el presunto femicidio de Cecilia Strzyzowski, escribió una nueva carta estando en la cárcel. A través de la misma, dice que cubrió a su hijo César Sena. Además, asegura que teme que su hijo atente contra su vida.
En un texto dirigido a su esposo, el líder piquetero Emerenciano Sena, la excandidata a intendenta le pide disculpas y acusa a su hijo de estar detrás de la desaparición y presunta muerte de Strzyzowski: “Siento que te fallé por cubrir a César y no puedo vivir con eso”.
La carta empieza: “Te quiero mucho Emerenciano, te pido que tengas la valentía de siempre, la que enseñaste y que hoy me mantiene firme en mis convicciones y en el amor. Me siento muy triste, pienso en César en todo lo que estará pasando y sufro mucho, pero dejo en manos de Dios y la Virgen que me lo cuiden hasta que pueda salir de aquí. Si salís antes no lo abandones, está muy solo y tengo miedo que atente contra su vida”.
“Hoy me levanté muy mareada, se me mueve todo, no quiero decir nada porque me llevan a hospital y me pasean como una delincuente. Nunca me sentí así, debe ser que estoy leyendo mucho. Sos mi horizonte, te quiero en libertad aunque yo no salga, vos sos mi líder, nunca te lo dije pero bueno , siempre fue así, siento que te fallé por cubrir a César y no puedo vivir con eso, si no salís no sé que va a pasar conmigo. Mi fuerza sos vos y ayudas a mi hijo”, es parte de lo que también expresa la carta escrita por Acuña.
En la carta, Acuña se quejó sobre sus condiciones de detención y asegura que el fiscal la “hostiga y usa a los policías”: “Me hace lo de César, me saca horas y días de visita, no puedo salir al patio, uso restringido el celular, no me permiten tener silletas, me sacaron cordones de mis buzos. Llamo diez veces para ir al baño, no me dejan entrar el MP3 con auriculares que tiene música, es a propósito para que escuche gritos toda la noche. Me baño con agua fría, todo es parte del hostigamiento”.
“Ojalá pronto llegue tu libertad, la mereces, yo no, yo lo cubrí a César, lo protegí, te oculté para no involucrarte y salió todo mal y mucha gente inocente está presa, empezando por vos. Esa carga también me mata por encubrir a mi hijo”, escribió Acuña en la carta. “Quizás Dios me escuche, y me bendiga o bien me haga ver la realidad, dejo en manos de él, hoy la prioridad es tu libertad. Te amo mucho, mucho”, cerró.